El pueblo estadounidense, distraído constantemente por tonterías como la llegada a la Luna o la muerte de Stan Lee, no se ha enterado que el corporativo que les gobierna desde la Casa Blanca ha invertido miles de millones de dólares para beneficio de la Casa Saud.
Fue Arabia Saudita la que más se beneficio por las dos costosas guerras en contra de Irak, ambas financiadas por los contribuyentes estadounidenses quienes ademas aportaron a sus hijos e hijas para ir a morir en aras de las estratosféricas ganancias por la explotación y comercialización de hidrocarburos obtenidas por los dueños de las compañías petroleras, mismas que cotizan en Wall Street.
Sí, la misma Arabia Saudita que contribuyó con John McCain a la creación de DAESH, el mortífero y despiadado grupo terrorista más conocido como Estado Islámico.
Sí, la misma Arabia Saudita que desde años está metida en una guerra de exterminio en Yemen, por cierto, conflicto que significó un calvario para el bombero vasco Ignacio Robles por el solo hecho de denunciarlo.
Sí, la misma Arabia Saudita que hoy se alinea con la genocida entidad sionista acorralando aún más al martirizado pueblo palestino.
Pues bien, uno de los integrantes de esa particular casta privilegiada ha cometido una travesurilla y la CIA ni tarda ni perezosa ha salido a denunciarlo.
¿Sucederá algo?
¿Cambiará algo en la relación ente Washington y Riyadh?
No lo creemos.
Tal vez, dentro de unos años, arrojen un ataúd vacío al Océano Índico diciéndonos que adentro del mismo está el cuerpo del travieso Mohammed bin Salman.
Y habrá tontos que se lo crean... como eso de la llegada a la Luna.
Miren ustedes lo que se reportan desde las páginas de Naiz:
La CIA ha concluido en un informe que fue el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed bin Salman, el que ordenó a las fuerzas de seguridad saudíes matar al periodista Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Estambul, según ha informado el diario estadounidense ‘The Washington Post’.Según ha publicado ‘The Washington Post’, la agencia de inteligencia estadounidense (CIA) ha concluido en un informe interno al que han tenido acceso que el responsable de ordenar matar al periodista Jamal Khashoggi fue el propio príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed bin Salman.En el informe se expone que la CIA examinó varias fuentes de inteligencia, entre ellas una llamada telefónica que tuvo lugar entre el embajador saudí en Estados Unidos y hermano del príncipe heredero, Jalid bin Salman, y el propio Khashoggi.En la conversación interceptada, Jalid insiste a Khashoggi para que acuda al consulado saudí en Estambul. De acuerdo con las fuentes citadas por ‘The Washington Post’, dicha llamada se produjo tras recibir órdenes de su hermano, aunque se desconoce si en ese momento el embajador tenía constancia de que existía un plan para eliminar al periodista.La conclusión de la CIA también se ha visto influida por la posición que mantiene el príncipe heredero en Arabia Saudí, donde actúa como líder de facto: «La posición aceptada es que no hay forma de que esto ocurriese sin que él lo supiera o estuviera involucrado», ha asegurado una de las fuentes anónimas cercanas a la investigación citadas por el diario estadounidense.El embajador saudí en Washinton y hermano del príncipe heredero ya ha negado haber hablado con Khashoggi por teléfono o haberle sugerido que fuera a Turquía. «Pido al Gobierno de Estados Unidos que haga pública cualquier información relacionada con esta acusación», ha exigido Jaled bin Salman a través de su cuenta de Twitter.
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