Un blog desde la diáspora y para la diáspora

lunes, 12 de noviembre de 2018

«Navarra y México a Xabier Mina»

Hablando de historia y cuanto suele trastocarla el revisionismo español, nos da gusto enterarnos por medio de Naiz que por fin se ha reconocido el gran aporte que llevó a cabo Xavier Mina en pro de la liberación de los pueblos de América del genocida yugo español.

Y es que si la unidad pedagógica que busca manipular y deslegitimar la actividad armada de ETA y otros grupos antifascistas es ya una clara muestra de la pesada carga ideológica fundamentalista de la clase política española, entérense ustedes que los libros de historia en México catalogan a Xavier Mina -a quien por cierto llaman erróneamente Francisco Xavier Mina- como traidor español, así como lo leyeron... traidor... español... siendo que no era ni lo uno ni lo otro.

Lo que fue Xavier Mina, sus acciones, lo clasificarían como un libertador y como un solidario internacionalista, nunca un traidor, pero dejen a los españoles trastocar todo en su favor, que muchos, muchísimos, son los crímenes de lesa humanidad que tiene que ocultar Madrid. 

Es por eso que nos alegra enterarnos que por fin lo han reconocido institucionalmente en la tierra que lo vio nacer: Nafarroa, Euskal Herria.

Aquí la nota al respecto publicada por Naiz:


Con la presencia del alcalde de Iruñea, Joseba Asiron, y decenas de personas, ayer tuvo lugar la inauguración de la plaza de Arrosadia que el Consistorio ha dedicado al guerrillero y héroe navarro de la independencia mexicana Xavier Mina. Un acto con el que se busca sacar del ostracismo en Nafarroa su figura en el doscientos aniversario de su muerte.

Los actos comenzaron en Otano, pueblo natal de Mina, para posteriormente trasladarse a Iruñea con motivo de la inauguración de la plaza que desde ayer lleva su nombre.

Las banderas de Nafarroa y de México, además de la ikurriña y la bandera arco iris, presidieron el acto, que comenzó con los himnos navarro y mexicano, y la colocación por parte del alcalde Asiron de un ramo de flores con una banda en la que se podía leer: «Navarra y México a Xabier Mina».

A continuación, tomó la palabra el historiador  Kepa Larrea, quien destacó que «ya era hora de que, gracias al Ayuntamiento, Xavier Mina tenga una plaza que nos recuerde su nombre y su figura después de 200 años de olvido. Navarra y México deben estar contentos de este homenaje a Mina, que dedicó su vida a luchar por la libertad en ambos lugares».

Tras bailarse un aurresku, el también historiador Tomás Urzainqui, descendiente de Mina por parte de un hermano del guerrillero, repasó la vida de Xavier (1789-1817), desde su época de guerrillero combatiendo a las tropas de Napoleón en Nafarroa hasta ser capturado en 1810, para posteriormente recordar la fracasada sublevación militar que dirigió en Iruñea en 1814 para poner fin al reinado absolutista de Fernando VII, su posterior exilio y la expedición que dirigió en México para conseguir la independencia del país azteca, hasta que fue capturado por las tropas españolas y fusilado el 11 de noviembre de 1817.

Urzainqui agradeció al alcalde Asiron que haya dedicado a Mina una plaza de Arrosadia situada en frente de la UPNA, «el mejor marco para recordar a este intelectual comprometido con la libertad». También se mostró agradecido porque el hecho de que Mina, «al fin, haya sido reconocido por las instituciones navarras» y confió en que su figura «sea un modelo a seguir por las generaciones navarras». Finalmente abogó porque, a futuro, se levante un monumento en recuerdo de «este luchador por la libertad».

Desde México, un texto de la historiadora Lidia Espinosa se sumó a la celebración enviando desde el otro lado del Atlántico «una felicitación al pueblo navarro por el esfuerzo realizado en recuperar a este héroe suyo y nuestro». Destacó que dedicar una plaza a Mina «sirve para mantener viva la llama de la memoria de quien fue un relámpago de gloria y esperanza en un momento oscuro de la lucha por la independencia». Recuperar su memoria «es un acto de justicia que sirve para tener presentes sus ideales: salud y libertad».

Nuevas danzas y unas canciones en euskara y castellano sirvieron para poner punto final al acto.





°

No hay comentarios.:

Publicar un comentario