Los mismos que alegan que la democracia está inscrita en su ADN, los mismos que alegan que han luchado a brazo partido en contra de la violencia, los mismos que exigen suelos éticos... se han dedicado a llenar sus bolsos y sus arcas en Suiza.
Son los mismos que se oponen por acción y por omisión a la oportunidad de abrir un auténtico proceso bilateral de paz y reconciliación.
De su hipocresía nos habla esta nota publicada en Naiz:
Barrena: «Algunos tienen interés en que el conflicto no se solucione porque se han forrado»
El portavoz de Sortu Pernando Barrena ha señalado que «los mismos que han buscado su enriquecimiento personal y han blindado su estatus a costa de la llamada 'lucha antiterrorista' son los que se han tapado mutuamente las vergüenzas cuando alguna denuncia de tortura conseguía romper el techo de cristal que se le imponía».
Pernando Barrena ha afirmado en Basauri que «algunos tienen tanto interés en que el conflicto político no se solucione nunca» porque se han «forrado a costa del antiterrorismo». «Robaron a manos llenas y, con ese dinero, pagaron sedes, se apañaban la vida laboral y la cuenta corriente», ha denunciado.
Barrena se ha pronunciado de este modo en un acto político celebrado por la formación en la localidad vizcaina bajo el lema «Tortura. Un instrumento de Estado contra Euskal Herria».
En su intervención, el dirigente de Sortu ha denunciado que «la práctica de la tortura ha tenido muchos padrinos a través del tiempo» ya que «gobiernos de todos los colores la han dado por buena» porque consideraban que «servía para obtener información, aparentar eficacia policial o simplemente amedrentar a los independentistas».
«La práctica de la tortura y el manto de silencio político y mediático que se ha tratado de imponer ha sido otra de las leyes no escritas que ha funcionado durante años», ha asegurado.
En esta línea, ha advertido de que «pactos de Estado» en los que «han estado el PP, el PSOE y también el PNV», como los de la Moncloa o Ajuria Enea, han dado «cobertura política a la tortura».
De este modo, ha denunciado que «no quieren que esto termine» porque «se han forrado y han vivido a costa del antiterrorismo y el margen para los chanchullos y la omertá se ha reducido drásticamente desde octubre de 2011», fecha en la ETA anunció el cese de su actividad armada.
El dirigente de Sortu ha planteado que el hecho de que «todavía se siga manteniendo la incomunicación y no se adopten nuevas medidas quiere decir que hay un interés más que evidente en que la tortura no desaparezca».
«No hay oferta democrática»
El dirigente de Sortu ha afirmado que el Estado, cuya «tarjeta de visita» ha sido «terrorismo de Estado, tortura, vulneración de derechos», no ha tenido «nunca una oferta democrática para Euskal Herria, tampoco para los Països Catalans y ahora tampoco para España».
Tras advertir de que «por lo menos a corto siguen en el esquema de no reconocimiento, en el esquema de la dependencia, del ordeno y mando», ha subrayado que «este país no está en condiciones de quedarse esperando a ver cuándo hay cambio de actitud en Madrid».
«España nos sigue tomando por menores de edad política, como súbditos supeditados a sus intereses, y eso tiene que acabar ya si no queremos caer como pueblo en la asimilación más absoluta», ha insistido. Por ello, ha apelado a impulsar la Vía Vasca «hacia la independencia».
Según ha advertido, «o dejamos que nos asimilen cultural, lingüística, económicamente como españoles, o trazamos nuestro propio camino, para vivir mejor, como sujeto nacional y para ser dueños de nuestro destino».
°
No hay comentarios.:
Publicar un comentario