En vísperas del aniversario de la masacre de los obreros vascos perpetrada por el régimen español, su actual representante ha tenido el desparpajo de visitar Gasteiz para prometer que cumplirá con el Estatuto de Gernika, ese ya anacrónico estatuto que lleva cuatro décadas sin ser completado y sin que ellos haya preocupado en lo más mínimo a los sociatas que anteriormente han servido de correa de transmisión de quien realmente manda desde La Zarzuela.
Tomando en cuenta que el PSOE ha estado en La Moncloa un total de 22 años -y contando- de los 41 que han transcurrido desde la creación del famoso estatuto, uno podrá poner el tema dentro de contexto. Tampoco olvidemos que el falso ingeniero Francisco López fungió como lehendakari 3/7 tras la criminalización de la izquierda abertzale y que desde que Urkullu tomase la poltrona de Ajuria Enea ha cogobernado con los sociatas.
Pero es que además, a 9 años de iniciado un proceso político que ha afianzado la opción soberanista en todo Hego Euskal Herria y con la muestra de fuerza del independentismo catalán hace apenas dos días en Perpinyà más pareciera que Pedro Sánchez tiene prisa en cerrar frentes ofreciendo cuentas de vidrio a cambio del servilismo del PNV. Seamos sinceros, el Estatuto de Gernika ha quedado vetusto y ya no representa -nunca lo hizo, de hecho- las aspiraciones del pueblo vasco.
Y es que encima, Don Pedro Sánchez, se ha atrevido a decir que los sociatas representan a la izquierda responsable, a la fiable. Si uno se hubiera olvidado de los GAL uno estaría tentado a reír tamaña bufonada.
Ya ni hablar del pequeñísimo detalle de la impunidad de la que han gozado los autores intelectuales y materiales de la masacre de Gasteiz, quienes durante estos 44 años han contado con el contubernio y la complicidad de los sociatas quienes desde La Moncloa se han asegurado de que todo siga atado y bien atado.
Así que aquí les dejamos con esta perla que nos comparte Gara:
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, prometió en un acto político en Gasteiz que, 41 años después de su aprobación, su gobierno «cumplirá» con el Estatuto de Autonomía de Gernika a través del traspaso de las competencias pendientes al Ejecutivo de Lakua.El líder del PSOE y presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, hizo público ese compromiso ayer en el acto de presentación de las candidaturas del PSE a las elecciones del 5 de abril, encabezadas en Bizkaia por Idoia Mendia, en Gipuzkoa por Eneko Andueza y en Araba por Gloria Sánchez.El presidente aseguró que las y los ciudadanos de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa tienen en Madrid a un gobierno que «entiende y asume como propia la diversidad» del Estado español. De esa forma, prometió que su Ejecutivo «cumplirá» con el Estatuto de Autonomía de Gernika, aprobado en 1979, pero para cuyo desarrollo íntegro aún están pendientes de transferir una treintena de competencias.Sánchez enmarcó este compromiso en su apuesta por una política de «diálogo y concordia», frente a aquellos que han contribuido a la «brecha» generada por la «falta de diálogo y entendimiento territorial». «Hay una mayoría en Euskadi y España que quiere vivir en tolerancia, respeto e integración», remarcó en otro momento de su intervención.En referencia a los independentistas catalanes y al PP, aunque sin citar a ninguno de ellos de forma expresa, lamentó que en los diez últimos años ha habido quien «ha respondido a los agravios con más agravios», añadiendo «nuevas afrentas» a las que se habían cometido previamente por la otra parte.«Ya sabemos el final de la política del ‘ojo por ojo’: todos ciegos», destacó. El presidente del Gobierno español lamentó que haya gente «en los dos extremos» que sigue dedicándose a «abonar la pelea, la bronca y la confrontación», pese a que ha quedado en evidencia que esa actitud solo ha generado «un reguero de frustración y fracaso».El líder del PSOE subrayó que quienes están en ambos «extremos» solo representan a una «minoría», y que aspiran a sociedades «homogéneas», en las que «no se acepta la pluralidad ni los modelos integradores».Por ese motivo, reiteró su compromiso con el «diálogo», y aseguró que el entendimiento «se abrirá paso» frente al «empecinamiento» y frente a «las zancadillas y obstáculos».Mendia evitará «batallas»La secretaria general del PSE y candidata a lehendakari, Idoia Mendia, manifestó que no les van a encontrar «nunca en batallas entre unos nacionalistas y otros, ni en políticas de trincheras, sino construyendo la Euskadi del siglo XXI, la Euskadi que progresa y cree en la convivencia y no se pregunta si uno es más vasco o más español».Según remarcó, en un momento en el que «nos viene Vox, otra vez a caballo, de la mano del PP, a asaltar el Parlamento a golpe de banderas y trincheras, que no cuenten con los socialistas para volver a lo que hemos conseguido dejar atrás».«Porque hemos conseguido acabar con los que mataban por pensar diferente, y hemos conseguido que quienes renegaban del Estatuto ahora lo acepten como la mejor herramienta para convivir», destacó.La líder del PSE alertó de «la antipolítica, el ruido y los extremismos que pretenden frenar la agenda del cambio en España y hacen peligrar los consensos básicos en Euskadi». «Esto es lo que está en juego en estas elecciones, mantener el equilibrio político que hemos sabido aportar los socialistas», aseguró.Apeló a quienes «no quieren que el Gobierno vasco vuelva a enredarse en banderas» y que, además, «tienen puesta en Pedro Sánchez la esperanza de salir del bucle de resignación y retroceso que proponen las derechas».«Todos esos ciudadanos deben saber que los socialistas somos sus mejores aliados, porque somos la izquierda responsable, la fiable», matizó.
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