El Camino de Mikel puede ser llamado ahora.
Mikel Azparren ha recorrido el Camino de Santiago en menos de 24 horas partiendo desde Orreaga en su natal Euskal Herria hasta culminar su gesta en Obradoiro.
Les invitamos pues a leer lo que ha vivido este ciclista vasco por conducto de La Voz de Galicia:
Llegó al Obradoiro y una caída lo llevó al hospital, pero ha cumplido un reto que intenta desde el año 2013Elisa Álvarez23 horas, 48 minutos y 43 segundos. Tres cifras que Mikel Azparren (San Sebastián, 1971) no olvidará. En ese tiempo recorrió el Camino de Santiago desde Roncesvalles hasta el Obradoiro subido a una bicicleta, logrando un récord que llevaba intentando desde el 2013. Y el domingo, a la quinta, fue la vencida. Tuvo además una llegada de lo más accidentada. Un familiar intentó frenarlo y acabó en el suelo con la clavícula rota y multitud de hematomas. Ahora tiene un único reto: «Recuperarme».-¿Qué tal se encuentra?-Aparte de la clavícula, el problema es el golpe de la cadera, por lo que no puedo andar. Tengo todo el lado derecho del cuerpo magullado. Pero he pedido que me dejen salir del hospital y ya estoy de vuelta porque tenemos un gimnasio familiar.-¿Cómo fueron las casi 24 horas pedaleando hasta Santiago?-Intensas. Parecen muchas, pero si vas en bici se pasan rápido. La salida fue muy bien. Los peores momentos fueron desde la cuarta hora hasta la novena.-¿En dónde estaba en esa etapa?-Llegando a Logroño, y duró hasta llegar a Burgos. Había mucho viento lateral, el calor era insoportable, pedaleaba casi con 36 o 37 grados, y aunque desde el coche mi mujer iba dándome agua, bebidas electrolíticas y suero fisiológico para compensar la pérdida de sales, lo cierto es que lo pasé bastante mal.-Hizo el reto en plena ola de calor, quizás con mejor temperatura hubiese conseguido rebajar más la marca.-No, la verdad es que aunque soy vasco prefiero tener algo más de temperatura. Es cierto que 36 grados es una burrada, pero al estar muy delgado correr con menos de 15 grados no va bien. Y hay que pensar que la gente se queda con el dato de los 36, pero por la noche, para que te hagas una idea, en Pedrafita estábamos a 11 o 12 grados.-La llegada fue accidentada.-La persona que intentó ayudarme, un tío de mi mujer, tenía buena intención, pero el resultado fue otro.-¿Cuál es su próximo reto?-De momento, recuperarme. Esto me ha costado mucho, al final ya ha sido amor propio y decir: ‘lo tengo que hacer’. Porque mi primer intento fue en el 2013; en el 2014 tuve que abandonar; en el 2015 fueron 24 horas y 15 minutos, y también me caí a medio camino, aunque no fue ni la mitad comparado con lo de ahora, y este año, hace unas semanas, tuve que abandonar porque no sé que le ocurría a mi cuerpo. pero no me respondía.-Al quinto intento.-Correcto, aunque solo he llegado tres veces.-¿Cómo fue la preparación?-Al año hago unos 16.000 o 18.000 kilómetros, realizando mucho más volumen de kilómetros hasta un mes y medio antes.-Hace dos semanas otro ciclista, Julián Sanz, llegaba también en menos de 24 horas, ¿lo conoce?-Lo conozco, él ha hecho otro Camino porque no subió a León, no pasó por las cinco capitales ni subió a la Cruz de Hierro. Yo he hecho el Camino original, pero seguro que el de él también está reconocido porque nunca pongo en duda el trabajo de los demás.-¿Qué organismo reconoce su récord?-Hay varias opciones. En mi caso hice el reto bajo las normas de la UMCA [siglas en inglés de la asociación mundial de ultraciclismo], y acompañado de dos jueces de esta entidad.-¿El Camino era su espinita?-Sí. Los vascos somos así, surgió que había esto y dije, pues lo hago yo, y se me quedó la espinita clavada porque no lo había conseguido, así que seguí hasta que lo conseguí.-¿Se dedica profesionalmente al ciclismo?-Tengo un gimnasio con mi mujer y esa es mi profesión, pero tengo también mis espónsores porque es cierto que sin ellos este reto es difícil. Aunque no lo parezca, tiene muchos costes.
°
No hay comentarios.:
Publicar un comentario