Los Aliados de Askapena

El estado español ha puesto en el banquillo de los acusados a la solidaridad internacionalista vasca.

Desde Diagonal traemos a ustedes lo declarado por internacionalistas de otras latitudes que han declarado en el juicio:

Los comités en solidaridad con Euskal Herria niegan actuar bajo las "directrices" de Askapena

Promotores de los boicots a Israel y Coca-Cola declaran ante la Audiencia Nacional el origen de las campañas, citadas en el sumario como iniciativas impulsadas por ETA.

“Somos una estructura libre, no recibimos directrices”, ha afirmado Jean-Baptiste Coyos, miembro del Comité de Solidaridad con el Pueblo Vasco de París. “Con Askapena hay una relación de amistad y solidaridad. No nos da directrices, no lo aceptaríamos”, ha afirmado Bruno Carvahlo, miembro del Comité de Solidaridad en Portugal. Son dos de los testigos que han declarado hoy en la que es ya la séptima jornada de juicio contra Askapena, organización internacionalista acusada por la Audiencia Nacional de ser el aparatado de relaciones internacionales, y contra cinco de sus militantes, para los que la Fiscalía pide seis años de cárcel por colaboración con banda armada.

El sumario 95-2010 acusaba también a los diferentes comités de solidaridad con el Pueblo Vasco, que estarían denominados 'Amigos de Euskal Herria', de actuar como “embajadas” de la banda armada bajo coordinación de Askapena. Los miembros de los dos comités de solidaridad han explicado que entre sus actividades estaba la convocatoria de manifestaciones, la organización de charlas y pegadas de carteles relacionados con la situación de falta de democracia en País Vasco, pero ni actuaban bajo las directrices de Askapena ni era ésta su única interlocutora.

Durante la vista oral de hoy, también ha declarado G.N.P., miembro del comité nacional de Askapena, quien ha explicado la estructura de la organización, en base a grupos locales y mesas de solidaridad de ida y vuelta, además de la asamblea y coordinadora nacional. También ha señalado que la financiación de la organización parte de las choznas en las fiestas populares y la venta de mecheros y otro material de merchandising.

Coca-Cola e Israel

G.N.P. también ha señalado entre las principales actividades de Askapena la organización de las brigadas y jornadas internacionales, y la participación en el Foro Social Europeo y en el Foro Social Mundial, en cuyo marco Askapena firmó una declaración de rechazo a toda forma de violencia requerida para participar en el grupo motor. También destacó la participación de la organización en las campañas de boicot a Israel –o BDS– y a Coca-Cola, ambas citadas en el sumario como llevadas a cabo bajo las directrices de ETA.

Eneko Calle, miembro de la asociación Paz con Dignidad –promotor de la campaña de boicot a Coca-Cola– ha declarado que la campaña contra la multinacional nació en Colombia para denunciar las violaciones de derechos humanos que la compañía cometía contra campesinos, sindicalistas y medio ambiente en el territorio. “Decidimos apoyar la campaña en 2003, a través de nuestro proyecto de Observatorio de Multinacionales en América Latina”. Calle ha explicado que en la campaña participan más de 30 organizaciones de todo el mundo, una de ellas Askapena, y que en Euskal Herria, la iniciativa tuvo como principal éxito que las choznas participaran no comercializando los refrescos de Coca-Cola durante las fiestas populares.

En la jornada de hoy también ha declarado Sergio Nicolás Yahni, miembro del Alternative Information Center, asociación israelí que trabaja a favor del reconocimiento y respeto de los derechos del pueblo palestino, una de las entidades promotoras de la campaña de boicot a los productos israelíes. “Recibimos brigadas y delegaciones internacionales, entre otras de Askapena”, ha explicado Yahni. El activista ha señalado que la campaña de BDS se lanzó en 2005, después de que se cumpliera un año sin que se pusieran en práctica las resoluciones internacionales sobre el conflicto entre Israel y Palestina. “Se hizo un llamamiento destinado a toda persona de bien que quiera que se cumplan las resoluciones internacionales sobre el conflicto”, explica.

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