Nafarroa Cuatrifachita

Pasado el optimismo exagerado en Gara se ha publicado un análisis mucho más realista acerca del panorama electoral con una derecha navarrica dividida sí, pero acarreando votos a las urnas.

Y si tomamos en cuenta que además de la remolonería de Geroa Bai y de Podemos hay que agregar la campaña de la izquierda folclórica llamando a la abstención, pues...

Aquí la información:

Mayoría de cambio o «cuatrifachito», la encrucijada navarra tras los 17.660 de Vox

El resultado de Vox en Euskal Herria ha sido poco relevante... salvo en Nafarroa y a un mes de las forales. Esos 17.660 votos le pueden dar dos o tres parlamentarios, lo que complica los cálculos a todos. Quizás más a los nostálgicos del Régimen, necesitados también de sumar al PSN.

Ramón Sola

El herrialde vasco en que más votos obtuvo Vox el pasado domingo fue Nafarroa; más incluso que en Bizkaia, que le duplica en censo. Para algunos será sorprendente, para otros no. Pero dejando de lado los motivos, lo relevante a cortísimo plazo es su impacto en las cruciales próximas elecciones autonómicas, en que se reproduce la pugna Cambio-Régimen. Y es que esos 17.660 apuntan a una entrada de Vox en el Parlamento navarro con la que no se contaba demasiado y que paradójicamente complicaría a Navarra Suma (la coalición UPN-PP-Cs) recuperar el Gobierno, puesto que para ello es requisito indispensable sumar también al PSN.

Hacer una proyección de voto para el 26M basada en el resultado de estas estatales carece de sentido, puesto que es seguro que PSN y Podemos perderán votos sin esa tracción estatal y Geroa Bai y posiblemente EH Bildu los ganarán por el mismo motivo. Pero sí se puede hacer una estimación que incluya las dos novedades de este 2019 (Navarra Suma y Vox) en los resultados de las anteriores forales.

En ella, Vox obtiene dos escaños que le resultarían insuficientes al «cuatrifachito» para formar mayoría, dado que Navarra Suma se quedaría en dieciocho en un parlamento de 50, que requiere por tanto 26. Tendría que sumar para ello a los siete del PSN, pero la hipótesis de que hoy el Paseo de Sarasate y/o Ferraz avalen una mayoría con Vox debe descartarse. Mirando a la historia, y también al escenario que parece enfriarse de una entente PSOE-Cs en Madrid, sí cabría un acuerdo Navarra Suma-PSN, sin Vox, pero tampoco sumaría 26, sino 25.

Un matiz final: esta parece la mejor perspectiva para la derecha, puesto que en la proyección de GARA se han sumado todos los votos de UPN, PP y Cs en 2015, cuando las recientes estatales ya han demostrado que Navarra+ no suma (se ha dejado casi 20.000 sobre lo acumulado por UPN-PP y Cs en 2016). Si se mira a todas las últimas elecciones, ya sean autonómicas o estatales, el bloque «facha –ya fuera » con dos o con tres listas, antes y después de Cs, antes y después de Vox también– tiene un volumen de voto muy fijo, en torno a las 125.000 papeletas. Surgen siglas, pero está estancado.

La entrada de Vox, lógicamente, también tendría influencia sobre el bloque de cambio, al haber una fuerza más para repartir escaños. En esa proyección basada en el mismo voto que entonces, tanto Geroa Bai como EH Bildu e I-E perderían un escaño por ello, mientras se mantendrían Podemos y PSN. Esto imposibilitaría la mayoría actual de Uxue Barkos.

Tampoco prosperarían terceras vías que siempre sobrevuelan el mapa navarro, como una eventual suma entre Geroa Bai, Podemos, PSN e I-E (excluyendo a EH Bildu); sumaría solo 23.

Hay matices pertinentes también dentro de este bloque. En lo positivo, tanto Geroa Bai como sobre todo EH Bildu han ganado solidez tras el paso por las urnas el 28A. El partido de Uxue Barkos ha pasado en porcentaje del 4,28% al 6,06% respecto a las anteriores estatales; y el soberanismo de izquierdas que liderará en las urnas Bakartxo Ruiz, aún más, del 9,36% al 12,77%. En lo negativo, tras su fractura interna en el Parlamento, el tirón de Podemos –cuya irrupción fue entonces catalizador principal del Cambio– es una incógnita inquietante.

Hechos los números y añadidos los matices, la fotografía que emana del 28 de abril deja para el 26 de mayo una conclusión clara: aquella ecuación Régimen o Cambio de 2015 ha dado pie a otra versión moderna que puede enunciarse como «Cuatrifachito» de derecha-extrema derecha versus Cuatripartito de progreso y abertzale.

De Iruñea a Tudela

El impacto de Vox en el panorama municipal, en los pocos sitios en que concurre, resultará bastante menor al ser más reducido el tamaño de las corporaciones. Los 4.840 votos logrados el domingo en Iruñea, por ejemplo, no le garantizan concejal, si tomamos en cuenta que en 2015 I-E se llevó el último con 5.823 pero PP y Cs se quedaron fuera con 3.831 y 3.631 respectivamente. Los problemas para Joseba Asiron, al que se vaticina un gran resultado, pueden venir más bien de la división total en el espacio «podemita».

Donde la extrema derecha sí apunta a ser absolutamente determinante es en Tudela, donde sorprendentemente se impuso el cambio hace cuatro años. Vox sumó ahí el domingo nada menos que 2.060 votos, triplicando casi la suma de las fuerzas abertzales EH Bildu y Geroa Bai (716) y acercándose a Unidas Podemos (el alcalde, Eneko Larrarte, es de I-E), que tuvo 2.997. Si la lista ultra mantiene tal fuerza el 26M, sumaría tres ediles y generaría un vuelco no ya a la derecha, sino a la extrema derecha.

En ningún otro punto de la geografía navarra Vox se ha acercado a los 1.000 votos, pero sí ha ido sumando cientos y cientos en las localidades más pobladas de Iruñerria (633 en Eguesibar y algo más de 500 en Barañain como mejores marcas) o en Erribera, donde ya fue muy patente la presencia de banderas españolas en balcones durante la fase álgida del procés.

Un análisis pueblo a pueblo, e incluso cuartel a cuartel (hay 53 de la Guardia Civil en Nafarroa), ofrecería una perspectiva detallada de la dimensión de esta ultraderecha que se ha quitado la careta en la tierra de las cunetas. Merecería estudiar por ejemplo cómo en una localidad pequeña de Iruñerria como Zizur (no confundir con Zizur Nagusia) tiene 278 votos mientras en Altsasu no llega a un centenar, en Sartaguda se queda en 39, en Tafalla logra 147 pero en su «gemela» Lizarra sube a 276...

Vox no se presenta ni en Barañain, ni en Tafalla, ni en Burlata...

Las grandes apuestas de Vox para el 26M se reducen realmente a tres: entrar en el Parlamento, acceder al Ayuntamiento de Iruñea y lograr decantar mayorías en el de Tudela.

Resulta significativo que finalmente solo haya podido presentar listas en ocho municipios. A las imprescindibles Iruñea y Tudela se les suma Lizarra, un puñado de municipios en que el 28A mostró cierta fuerza (Zizur, Cortes, Erri Berri y Eguesibar), y Altsasu por una cuestión que solo se explica por la obsesión con explotar esta localidad. Faltan toda Iruñerria, Tafalla, Zangoza...

Vox y el conjunto de la derecha, en cifras en Nafarroa

Triple que Gipuzkoa

Quizás no sorprenda por los antecedentes históricos, pero Vox muestra a Nafarroa como el herrialde vasco en que la ultraderecha tiene más peso, con cierta diferencia. En segundo lugar tras este 4,83%, figura Araba, donde llega a un 3,16% (5.587 votos), luego Bizkaia con el 2,31% (15.792), y finalmente Gipuzkoa con un 1,63% muy residual (6,683 votos), apenas un tercio de su impacto en Nafarroa.

34,15% ante 37,51%

Este 28A refleja mejor la relación de fuerzas entre bloques si se observa desde el porcentaje acumulado. Las dos listas de la derecha (Navarra Suma y Vox) apenas han sumado el 34,15% del voto emitido, menos que el 37,51% logrado por Unidas Podemos, EH Bildu y Geroa Bai. Entre medio está el 25,75% del PSN; si gran parte de ese voto ha sido «refugio» frente a la derecha, lo lógico es que el 26M vote cambio.

-2.697 de la derecha

Una lectura superficial muestra que Navarra Suma ha sumado casi lo mismo que en 2016 UPN y PP solos (148 votos más). Eso no quiere decir que Cs no haya aportado sus 20.505 de entonces, sino que más bien por el otro lado de la coalición Vox le ha birlado 17.660. Sea como sea, lo esencial es que el «cuatrifachito» ha perdido 2.697 desde entonces; mucho en un contexto con nueve punto más de participación.

27,5% es en Iruñea

Iruñea tiene casi la mitad de la población del herrialde, pero en la capital Vox apenas cosecha algo más de un cuarto de sus votos totales (4,840 sobre 17.660, lo que supone el 27,5%). El reverso de la moneda lo marca Tudela, donde la ultraderecha recoge 2.060 votos que proyectados al Ayuntamiento le pueden dar tres cargos de concejal el 26 de mayo, condicionando claramente las mayorías.

4,83% en Nafarroa

El porcentaje de voto acumulado por Vox en estas elecciones supone el 4,83% del emitido en Nafarroa, y por tanto le da cierta holgura para superar también en mayo el 3% mínimo para acceder al Parlamento. Cabe recordar que en 2015 Ciudadanos se quedó a cuatro centésimas (2,96%) de esa criba, con lo que sus casi 10.000 votos se fueron directamente a la papelera.

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