No es necesario que entremos en detalles acerca de la monstruosa y letal farsa que Washington y Tel Aviv han montado en Siria e Irak. A su colección de "grupos rebeldes" en Siria agregaron el Estado Islámico en Irak, terror que pronto se extendió por los dos países, para conveniencia de Arabia Saudita y la Unión Europea.
Maniatado el ejército sirio, correspondió a los grupos armados clandestinos darle la vuelta a la situación, permitiendo así a los militares al servicio del gobierno de Damasco retomar el control de la situación. Desde el Líbano Hizbollah ha hecho cera y pabilo de los mercenarios en la nómina del entente CIA-Mossad. En Rajova ha correspondido a los peshmergas hacer lo propio, lo que ha desatado la furia de Ankara en contra de los kurdos como pudimos constatar con el cruento operativo en contra de las juventudes comunistas que tomó lugar en Suruç.
Ankara, sabedora de que cuenta con el apoyo incondicional de la "comunidad internacional" y, siguiendo el guión diseñado desde Washington, ha incrementado los operativos en contra de los kurdos, como nos cuenta esta nota publicada en Naiz:
Las fuerzas turcas matan a tres personas durante un operativo contra «simpatizantes» del PKK
Tres personas han muerto durante una operación policial contra supuestos «simpatizantes» del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el municipio de Silopi, situado en la provincia de Sirnak, en Kurdistán Norte.
Los enfrentamientos se han producido cuando unidades de la Policía han llegado a un barrio de Silopi para rellenar las zanjas que los vecinos habían abierto en varias calles para impedir el paso de vehículos policiales, informa la agencia semipública Anadolu, que atribuye esta acción a «simpatizantes del PKK».
Según la versión oficial citada por la agencia, los blindados policiales habrían sido objetivo de disparos, lo que habría desencadenado un tiroteo que se prolongó durante cuatro horas.
Tres personas han fallecido bajo el fuego policial y un agente ha quedado gravemente herido cuando su blindado ha sido atacado, al parecer con un lanzagranadas. La agencia kurda Firat añade a ese balance la cifra de ocho heridos.
El enfrentamiento llega después de una noche de ataques simultáneos del PKK contra cuarteles de gendarmería en Kurdistán Norte que no han causado víctimas entre las fuerzas de seguridad, aunque sí ha resultado herido un ciudadano en Cizre, situado también en la provincia de Sirnak.
En la misma zona, guerrilleros del PKK han atacado esta madrugada con lanzagranadas un vehículo policial, dejando heridos a dos gendarmes.
Sirnak es una de las provincias donde más ataques del PKK se han producido desde que los bombardeos de Turquía provocaron la ruptura del alto el fuego entre Ankara y la organización kurda.
En estas dos semanas, el PKK ha causado 18 víctimas entre las fuerzas de seguridad turcas, a los que se añaden un obrero ferroviario y un civil, mientras que una decena de personas, entre civiles, simpatizantes del PKK y guerrilleros, ha muerto en acciones policiales en Turquía.
A esta cifra se añade al menos una docena de miembros del PKK muertos en bombardeos aéreos turcos contra los refugios de la guerrilla en Kurdistán Sur y al menos 5 civiles de esta región.
Además, centenares de personas han sido arrestadas bajo la acusación de tener vinculación con el PKK.
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