Sin embargo, los últimos hechos demuestran que los que si apuestan por la violencia, la represión y la falta de respeto a los más básicos derechos de un pueblo, son precisamente los españoles.
El reciente traslado de los seis vascos apresados en México a las mazmorras de Soto del Real pone esto en evidencia. Los seis fueron pedidos por José María Aznar y su troglodita Balatasar Garzón, ha que mancuerna represora formaban aquellos dos. Pero el echo es que la extradición, plagada de irregularidades desde su inicio cuando Garzón falló al entregar el pedido de extradición días despues de efectuados los arrestos, se ha concretado con José Luis Rodríguez como primer ministro y Fernando Grande-Marlaska como sucesor de la vedette jurídica que en estos momentos goza de un merecido descanso arropado entre los sectores más racistas y retrógradas de los Estados Unidos de América.
Y que decir de las constantes amenazas en contra de Arnaldo Otegi, acusado una y otra vez de crímenes que nada más los muy españolistas pueden ver. Porque hay que ser muy bruto para no ver que por muy motive ornato que el tal Juan Carlos es, como rey de los españoles está estipulado que el es el jefe máximo de las fuerzas de seguridad, y como estas son muy dadas a la tortura, pues entonces él es el jefe de los torturadores, decir lo cual no es una calumnia, sino dar una rendición fiel de un hecho innegable.
Ha esto se une la bestial represión de ayer contra los jóvenes de Segi con la criminal colaboración de el falangista vasco Javier Balza.
El caso es, los españoles siempre han apostado por la violenta represión del sueño vasco de autodeterminación, en el pasado se parapetaban detrás de la calumnia y la tergiversación, el día de hoy, desarropados por el valiente cese el fuego de ETA, quedan expuestos frente al mundo por lo que son.
La desenfrenada iniquidad de Madrid ha pues cobrado la libertad y las ilusiones de otros seis vascos, contando para esto con el entreguismo del gobierno mexicano de Vicente Fox.
Hoy se encuentran los seis en Soto del Real, engullidos por la farsa que es la maquinaria jurídica española, que los considera culpables hasta que se demuestre lo contrario, por ser vascos.
He aquí la nota por parte de La Jornada el día de hoy:
El proceso de paz, "en un momento grave": Otegi
Los vascos entregados por México ingresan a la cárcel de Soto del Real
Madrid, 19 de mayo. Los seis ciudadanos vascos extraditados el jueves de México ingresaron este viernes en la prisión de alta seguridad de Soto del Real -a unos 40 kilómetros de Madrid-, después de que negaran ante el juez de la Audiencia Nacional española, Fernando Grande-Marlaska, su presunta pertenencia a la organización armada vasca ETA.
Juan Carlos Artola, Asier Arronategi, María Asunción Gorrotxategui, José María Urquijo, Ernesto Alberdi y Félix Salustiano García llegaron alrededor de las ocho y media de la mañana -local- al aeropuerto militar de Torrejón de Ardoz, donde fueron puestos a disposición de la policía.
Durante el vuelo que los trasladó de la ciudad de México a Madrid, los seis ciudadanos vascos fueron custodiados por agentes de Interpol-España, que "en todo momento tuvieron un trato correcto con los detenidos", según relató el abogado Joseba Agudo.
Al llegar a la capital española, los vascos fueron fotografiados y esposados antes de ser trasladados a las dependencias de la Audiencia Nacional, órgano judicial responsable de los delitos relativos a actividades terroristas.
Después de permanecer más de seis horas en los separos del tribunal, finalmente se inició la vista oral en la que el magistrado les informó de los delitos que se les imputan: "asociación ilícita e integración en organización terrorista, captación de fondos con fines terroristas y blanqueo de capitales procedente de actividades terroristas". Los seis vascos negaron los delitos que les atribuyen y su pertenencia a la ETA.
Más de 10 horas después de su llegada a Madrid, los vascos fueron trasladados a la prisión de alta seguridad de Soto del Real, donde permanecerán hasta que se inicie el juicio oral o podrían ser trasladados de cárcel si lo decide el juez instructor.
Según los informes policiales y judiciales españoles, de los seis vascos extraditados sólo dos cuenta con un "extenso historial delictivo", que son Ernesto Alberdi y Félix Salustiano García.
Por su parte, el dirigente de la izquierda separatista radical vasca, Arnaldo Otegi, advirtió que el proceso de paz para el País Vasco se encuentra en "un momento de extrema gravedad", al señalar que hay personas que "quieren sabotear, destruir y abortar las posibilidades de resolución del conflicto".
La afirmación de Otegi, vocero de la ilegalizada Batasuna -considerada por Madrid como el brazo político de ETA-, se realizó el mismo día en que trascendió un nuevo proceso en su contra.
Ante el cúmulo de juicios en su contra y el impasse del Ejecutivo español, del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, de avanzar en el proceso de paz y superar la etapa de "verificación" del alto el fuego permanente decretado por ETA, el vocero de Batasuna explicó que "si no acaban las agresiones costará mucho más volver a poner el proceso en marcha". Sin embargo, Otegi también insistió en que continúa habiendo "una posibilidad real de una resolución del conflicto".
Nico,
ResponderBorrarGracias por respetar mi nacionalismo.
En lo que respecta a Garzón, llamarlo troglodita es con perdón de los trogloditas, Garzón es una verdadera bestia y un criminal por sus actos en los que colabora con la represión asesina por parte de Madrid en contra de los vascos. Lo mismo va para Grande-Marlaska.
Te invito a tí a reflexionar acerca de todos los crímenes que se han cometido en contra del pueblo vasco que se han quedado impunes.
Lo de la risa de los dos condenados ni me viene ni me va, si se compara con el hecho de que todos los franquistas que tantos asesinatos cometieron en Euskal Herria nunca fueron juzgados y sentenciados.
Y ni que decir de la tibia palmada en la mano que recibieron los de las GAL. O la excarcelación de que gozó la autora intelectual del asesinato de Angel Berrueta.