Un blog desde la diáspora y para la diáspora

lunes, 26 de marzo de 2018

La Primavera Catalana

50 años después de la Primavera de Praga, nos llega la Primavera Catalana.

Aquella se publicitó en favor de los designios de la derecha otánica. Esta va a intentar ser sofocada en favor... de la derecha otánica.

Aquella vendía la democracia capitalista como la solución a los problemas de la humanidad, vientos de cambio nos dice la melosa canción de Scorpions. Esta nos muestra que la democracia capitalista de la que tanto alardea Europa es en realidad un cascarón vacío, capaz de callar ante la brutalidad policíaca, capaz de mantenerse impertérrita ante el encarcelamiento de líderes sociales, capaz de capturar y encarcelar a un presidente democráticamente electo en favor de un régimen autoritario heredero de una brutal dictadura. 

Les invitamos a leer la editorial de Naiz con respecto a los recientes acontecimientos en Europa con respecto a Catalunya:


La detención del president Carles Puigdemont por parte de la Policía alemana, tras un operativo coordinado por la española y el CNI, ha tenido un impacto mediático y político brutal. La principales cabeceras del mundo se hacían eco de la noticia, la cuestión catalana ha vuelto al epicentro de la política europea y provocó una rápida reacción popular en Catalunya, con masivas y variadas movilizaciones coordinadas por la ANC y los Comités de Defensa de la República. Los encarcelamientos y el exilio de líderes independentistas catalanes del viernes, el pleno del Parlament del sábado y la detención de Puigdemont de ayer han hecho que la dinámica política en Catalunya adquiera otro voltaje. La tensión política vuelve a ser máxima y el esquema del relato de humillación y dominio que querían imponer los golpistas del 155 ha quedado seriamente en entredicho.

Ni la detención del mayor referente del independentismo catalán, ni el intento de descabezar a toda la primera fila de líderes independientes mediante una causa general de jueces prevaricadores, han conseguido meter miedo y hacer que cunda la desesperación en el pueblo catalán. No han conseguido su objetivo. La involución del 155 que condena a Catalunya a ser una autonomía intervenida policial, política y económicamente, sin otro margen de gobernar que la miseria absoluta, se diseñó para que durara mucho tiempo y fuera cronificándose. Erraron el cálculo.

España no lo tendrá fácil. Catalunya ha acelerado de manera impresionante. La internacionalización del conflicto es un hecho. Amplios sectores de la sociedad siguen movilizados y muy indignados, dispuestos a tirar para adelante. Esa reacción popular interpela a los partidos, reclama liderazgo, jugar a grande, desplegar vuelo de la vía muerta que han construido con cemento jurídico y armado los chantajistas vengativos de Madrid. La primavera catalana va a tensionar la situación. Esa fuerza desatada hará que la solución política florezca y se imponga como necesidad.






°

No hay comentarios.:

Publicar un comentario