Dentro del recinto del juzgado de Donostia y actuando como emisarios de su jefe Alfredo Pérez Rubalcaba, los ocho miembros de la franquista Guardia Civil involucrados en el caso de torturas en contra de Igor Portu dejaban claro que sus crímenes de lesa humanidad quedarían impunes. Fuera del recinto los esbirros de Jabier Balza se lanzaban contra los que allí se manifestaban en contra de las acciones represivas ordenadas por Borbón, Zapatero y Garzón.
He aquí la nota al respecto publicada por Gara:
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Los ocho guardias civiles se escudan en la versión de Rubalcaba
Los ocho guardias civiles responsables del arresto, posterior traslado y custodia de Igor Portu han comparecido en calidad de imputados ante el Juzgado de Donostia donde han ratificado la versión ofrecida por Alfredo Pérez Rubalcaba. Fuera, la Ertzaintza ha cargado contra ciudadanos que participaban en una concentración.
Los ocho guardias civiles se han aferrado a la versión oficial avalada por el ministro de Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien aseguró en su día que las graves lesiones de Igor Portu fueron consecuencia del forcejeo en el momento de la detención.
Los ocho imputados, que han comenzado sus comparecencias a las 09.30 de la mañana, se han negado a responder las preguntas de Torturaren Aurkako Taldea que ha ejercido de acusación particular en el juicio. No obstante, sí que han respondido a las cuestiones planteadas por el juez, el fiscal y sus abogados defensores.
Así, han respaldado la versión que dio Rubalcaba horas después de que el Igor Portu fuese ingresado con urgencia en la UCI del Hospital Donostia con múltiples golpes, un pulmón perforado y neumotórax.
Alfredo Pérez Rubalcaba se vio forzado a comparecer en la tarde del pasado 7 de enero, después de que pasadas las 4.00 de la madrugada Igor Portu ingresara de forma urgente en la UCI hospitalaria. El ministro del Interior afirmó que efectivos de los GAR de la Guardia Civil tuvieron que "emplear la fuerza (durante las detenciones), por lo que se produjeron lesiones de distinta consideración". Quiso además anunciar que el segundo detenido, Mattin Sarasola, también mostraba lesiones en su cuerpo.
En la comparecencia, Rubalcaba omitió la hora del arresto. Una información que en apenas 24 horas desapareció de todos los medios de comunicación. Y es que el 6 de enero se informó de que los arrestos se practicaron a las 13.00 y en un control de carretera. Sin embargo, Rubalcaba sí informó de que Portu y Sarasola fueron detenidos en Arrasate o argumentó que las lesiones que presentaron se debían a que habrían tratado de huir, por lo que los guardias civiles les habrían derribado.
Fuerte carga de la Ertzaintza
El movimiento pro amnistía había convocado para las 12.00 del mediodía de hoy una concentración de protesta frente al Juzgado de Donostia, donde han comparecido los ocho guardias civiles que, según el Ministerio de Interior español, fueron los responsables del arresto de Igor Portu y Mattin Sarasola.
Decenas de personas se han sumado a la convocatoria para denunciar los casos de tortura registrados en los últimos meses. Al final de la protesta, la Ertzaintza ha identificado a dos personas y les ha advertido con cargar contra ellos si no disolvían la movilización en cinco minutos.
Según han informado testigos presenciales a GARA, cuando los manifestantes ya han recogido la pancarta que encabezaba la concentración y antes de que se agotase ese periodo de tiempo se han dispuesto a cantar el Eusko Gudariak y los ertzainas han comenzado a cargar contra ellos.
Durante la carga al menos dos personas han resultado heridas de consideración. Según testigos de lo sucedido, se trata de una mujer y un hombre y éste último ha recibido un pelotazo en los genitales y ambos han sido trasladados al ambulatorio de Egia.
Además, un joven ha permanecido retenido durante algunos minutos junto a una furgoneta de la Ertzaintza.
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