Les compartimos esta nota de la AFP publicada en la página de El Economista:
Visita de expertos al País Vasco suscita esperanza de desarme de ETA
La visita este viernes al País Vasco de un grupo de expertos internacionales, pocos días después del anuncio de un gesto inminente por ETA, suscita en la región la esperanza de un premier paso en el desarme de la organización independentista vasca.
La Comisión Internacional de Verificación, grupo de expertos en conflictos creado en 2011 y no reconocido por Madrid, anunció de forma lacónica que hará un anuncio "muy significativo y positivo" durante esta visita, centrada en reuniones con partidos políticos vascos, seguidas por una rueda de prensa en Bilbao.
En el País Vasco la noticia fue interpretada como un posible avance hacia un desarme de ETA, próxima etapa lógica tras el cese de su actividad armada el 20 de octubre de 2011.
El gobierno vasco, dirigido por los nacionalistas conservadores del PNV, "espera que las noticias que se puedan producir este fin de semana sean serias, que sean solventes y que no se reduzcan sólo a algo testimonial, declarativo o simbólico sino que representen hechos firmes en la línea del desarme y de la desaparición de ETA", subrayó este miércoles su representante Jonan Fernández.
ETA, muy debilitada por la presión policial y política y que sólo tendría una treintena de miembros en la clandestinidad, se negaba hasta ahora a contemplar un calendario de desarme mientras no se aceptasen sus reivindicaciones, entre ellas una flexibilización de la política penitenciaria hacia sus presos.
El gobierno conservador español, por su parte, hace oídos sordos y exige la disolución sin condiciones de la organización.
Tras este bloqueo aparente, se movieron sin embargo las líneas en el País Vasco: los partidos de la izquierda independentista ganaron peso político en los últimos tres años, tras rechazar la violencia, y ETA multiplicó sus mensajes desde su último atentado en suelo español en agosto de 2009.
Una nueva señal llegó el 28 de diciembre con un mensaje del colectivo EPPK, que reúne a los más de 500 presos de ETA dispersos por las prisiones de España y Francia.
Este texto, muy esperado, ratificaba el abandono de la violencia y aludía, por primera vez, a posibles gestiones individuales para su excarcelación, renunciando aparentemente a su reivindicación histórica de una amnistía colectiva.
Este anuncio fue ampliamente interpretado como una flexibilización de la posición de ETA, clasificada como organización terrorista por la Unión Europea y Estados Unidos y considerada responsable de la muerte de 829 personas en más de 40 años de atentados por la independencia del País Vasco y Navarra.
Otros pasos llegaron paralelamente de la sociedad vasca: el 11 de enero, una manifestación reunió a más de 100.000 personas en Bilbao, convocada conjuntamente, pese a sus divergencias, por la izquierda independentista y el PNV, para reclamar el fin de la "dispersión" de los presos etarras.
El 7 de febrero, en un comunicado, ETA recogía estas "oportunidades de avance" y anunciaba que "en un tiempo no extenso" haría "aportaciones significativas".
"Todos son pasitos que se están dando, y creo que se dará ya otro pasito importante, más importante quizás, este próximo viernes", afirma el periodista Gorka Landaburu, especialista de la cuestión vasca.
Creada poco antes del histórico anuncio del cese de la violencia de ETA, la Comisión, que desde entonces trabaja entre bastidores, está compuesta por cinco expertos: su presidente Ram Manikkallingam (Sri Lanka), Ronnie Kasrils (Suáfrica), Ray Kendall y Chris Maccabe (Reino Unido) y el general indio Satish Nambiar.
Su diálogo con miembros de ETA en Noruega había terminado a principios de 2013, en un contexto de bloqueo total. Pero, tras una pausa, parecen haber reanudado en los últimos meses los contactos, directos o indirectos, desembocando en esta visita.
"No se hablará de disolución todavía", considera Landaburu. El anuncio de un desarme total parece prematuro, pero el País Vasco se prepara para un paso en esa dirección.
De confirmarse, la noticia podría materializarse en informaciones geográficas sobre escondrijos de armas de ETA, situados en su mayoría en Francia. O podría limitarse a la promesa de que tales informaciones se darán proximamente.
Es notorio el cambio en la línea editorial... ¿se le hace grumos el atole a Madrid?
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