Arrondo : Hoja Sin Ruta

Este texto lo hemos recibido por correo electrónico:

Hoja sin ruta

El proceso de resolución del conflicto vasco no solamente está detenido, sino que desde Madrid y con el visto bueno de sectores políticos del País Vasco, pareciera que estuvieran redactando su acta de defunción. En este sentido, todo indica que la consigna es tensar la cuerda, alejando cada vez más la posibilidad de llegar a conformar una mesa de diálogo, con el fin de comenzar a transitar un camino que garantice al pueblo vasco, decidir cual será su futuro.

Las elecciones de mayo (municipales y forales) son importantes para la renovación de los cargos, a partir de las preferencias de los ciudadanos, pero estas, no deben constituir el Talón de Aquiles del proceso de resolución del conflicto vasco. La no-derogación de la ley de partidos posibilita a los partidos y a la justicia española, aprovechar la coyuntura para bajo los auspicios de la cuestionada ley, llevar adelante un minucioso análisis de las candidaturas presentadas sobre todo en Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca por ANV y Abertzale Socialistak, para el deleite al menos, del Partido Popular.

Los abogados del Estado estarían por impugnar un importante porcentaje de las candidaturas presentadas por Acción Nacionalista Vasca (ANV), partido fundado en 1930 y con una trayectoria enmarcada en la "legalidad" exigida por Madrid, ya que condena la violencia, como método para la resolución del conflicto vasco. Tampoco han escapado a la lupa española las candidaturas de Abertzale Socialistak, propiciando con esta actitud, un aumento de la crispación, la cual no beneficia a nadie.

De nada sirve anunciar el regreso de "la catástrofe", y negarse a dialogar, en definitiva propiciar el inmovilismo, que no hace más que retroceder a los años de culto diario al autonomismo, como una segura formula que garantiza poltronas, cargos y privilegios. Todo indica que hasta el "Plan Ibarretxe" formaría parte del museo de novedades políticas, si bien todavía a esta legislatura le queda la mitad de su mandato, a no ser, que se propicie una salida anticipada del Lehendakari Ibarretxe, lo cual tampoco constituiría una novedad política en la CAV.

A Zapatero le cabe también una gran dosis de responsabilidad de la impugnación de las candidaturas, porque sabe muy bien, que es una forma de congelar el proceso de resolución del conflicto vasco, y con ello la posibilidad de que las ciudadanas y ciudadanos vascos puedan decidir por medio de un referéndum, que quieren ser de cara al futuro. En este sentido, las elecciones de mayo no pueden ser el eje central de la resolución del conflicto vasco. La inmovilidad, la falta de acuerdos y de disposición al diálogo, llevan al proceso de paz y normalización política a un callejón sin salida. Espero que la intimidad, que todos tenemos con nuestra conciencia, podamos reflexionar sobre la gravedad de la hora y poder reaccionar con una actitud patriótica. Mientras tanto, hoy la realidad nos indica que para resolver el conflicto vasco, sólo existe una "Hoja sin Ruta".

Prof. César Arrondo | Universidad Nacional de La Plata/Argentina

.... ... .