Y es que envalentonados por su éxito electoral en Madrid donde su táctica de miedo triunfó ampliamente, los franquistas del Partido Popular han tratado de desviar la atención de un hecho contundente al que a la de ya debiera estar poniendo atención la ONU: El PP perdió su control ferreo sobre Araba y Nafarroa.
La formación Nafarroa Bai le arrebató muchas plazas y si no hubiera sido por la troglodita prohibición de listas por parte de el aparato represivo estatal español encabezado por la Audiencia Nacional y el Tribunal Constitucional el margen de derrota hubiera sido mayor.
Pues bien, aquí esta una nota por parte de La Jornada que nos habla un poco acerca del progreso logrado en Nafarroa, una herrialde que necesita despojarse ya de las añejas ataduras de la derecha política y de la iglesia católica.
Helo aquí:
Rodríguez Zapatero, PP y PSOE, satisfechos con resultados de la jornada electoral
España: 3 comunidades autónomas, en espera de que partidos formen alianzas
La izquierda abertzale se convierte en tercera fuerza política en el País Vasco y NavarraMadrid, 28 de mayo. Un día después de la jornada electoral en España, tres comunidades autónomas -Islas Canarias, Islas Baleares y Navarra- están en espera de que los partidos políticos tejan las respectivas alianzas para formar gobierno.
El derechista Partido Popular no logró la mayoría absoluta en Baleares y Navarra, con lo que, ante su incapacidad para firmar pactos con otras formaciones, se abre la posibilidad de que se produzca una alternancia en el poder, en virtud del crecimiento electoral del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Baleares, y en el caso de Navarra de los nacionalistas moderados de Nafarroa Bai (Nai).
Como es habitual en los comicios municipales y autonómicos -en los que estaban en juego más de 8 mil municipios y 13 de las 17 comunidades autónomas-, los dos principales partidos políticos, PSOE y PP, se declararon satisfechos de los resultados obtenidos, a pesar de que en ambas formaciones afrontan una situación delicada en varios frentes.
En el caso del partido en el gobierno central, preocupa el resultado obtenido en la capital del país, Madrid, donde la derecha española obtuvo un triunfo histórico, mientras el PSOE perdió más de 170 mil votantes.
Además, el PSOE ve con preocupación que a pesar de tener tres años en el gobierno central no ha logrado despegarse de su principal rival, que incluso le ganó en número de votos, con un diferencia de 0.7 puntos porcentuales. Con estos resultados las elecciones generales del próximo año se presentan más reñidas de lo esperado, con lo que estaría en riesgo la continuidad del proyecto del presidente José Luis Rodríguez Zapatero y las reformas sociales emprendidas desde 2004, además de una hipotética reanudación del fallido proceso de pacificación del histórico conflicto vasco.
El mandatario señaló que "mejor que todos estemos satisfechos, pues estas son las cosas positivas que tiene la democracia. Es, quizá, el mejor balance y resultado de una jornada electoral que transcurrió con alto grado de ejemplaridad". Sin embargo, el secretario de organización socialista, José Blanco, reconoció que "es evidente que tenemos un problema en el ámbito de esa comunidad (Madrid)", aunque apuntó que "el balance es claramente positivo, ya que salimos con más concejales, más alcaldes y más posibilidades de gobiernos autonómicos".
El líder del PP, Mariano Rajoy, se reunió con la dirección ejecutiva de su partido para analizar lo que definió como "los mejores resultados" en la historia de su formación, que por primera vez desde el año 2000 logró superar en número de votos al PSOE.
Sin embargo, la derecha española afronta al menos tres situaciones adversas tras estos comicios: el futuro de su continuidad en Navarra y Baleares, donde había gobernado los pasados 20 años, y al perder la mayoría absoluta y no tener sobre el papel la posibilidad de tejer alianzas con otros partidos políticos; la segunda cuestión que analiza el PP es la importante merma de votantes en algunas regiones del país, sobre todo en Galicia, País Vasco y Cataluña; por último, su reducción de poder territorial, al lograr menos concejales que su principal rival, que le superó por más de 700 representantes municipales.
Ante ese escenario, Rajoy propuso al resto de las formaciones políticas un acuerdo para que siempre gobierne la lista más votada, que de inmediato fue rechazada por el PSOE y la izquierda en general, al considerar que esa iniciativa atenta contra la esencia de la democracia.
El caso de las Islas Canarias, también pendiente de la formación de gobierno, es singular, ya que a pesar de que el PSOE fue el partido más votado, depende de un pacto con otra formación, que se presenta difícil, dado que los otros dos partidos con presencia en el parlamento son Coalición Canaria (CC) y PP, aliados históricos en esta comunidad.
Mientras, en el País Vasco la izquierda abertzale (nacionalista) también festejó los resultados de los comicios, en los que, a su entender, los ciudadanos dieron un varapalo a la "política de represión".
La ilegalización de las listas electorales de Batasuna, a excepción de 133 listas electorales de Acción Nacionalista Vasca (ANV), movilizó a los votantes afines a esta ideología, con lo que, según las cuentas de esta formación, que sumó los sufragios "oficiales" a ANV y los nulos, habrían obtenido un total de 187 mil entre el País Vasco y Navarra.
Es decir, según esa cifra, ANV se convertiría en la tercera fuerza en la región, sólo superada por el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y el PSOE.
El vocero de Batasuna, Pernando Barrena, señaló que la izquierda abertzale "es hoy más fuerte que hace cuatro años, política y electoralmente".
El gobierno de Rodríguez Zapatero, dijo, "ha recibido un durísimo varapalo en su apuesta de ilegalización; son 187 mil bofetadas a esta estrategia". El dirigente vasco también resaltó la posición de privilegio de su formación política en Pamplona, donde obtuvo dos concejales, que resultarán vitales para la formación de gobierno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario