Cien años se dice fácil, pero lean este reportaje publicado en Deia para ver que en ese periodo pueden suceder muchas cosas, como es el caso de la aspiración del pueblo vasco a contar con su propio representativo ante las justas futbolísticas internacionales.
Aquí lo tienen:
Selecciones vascas, cien años de lucha por un sueño
Leioa acoge la exposición que recoge el siglo de historia de las selecciones vascas de fútbol
Miguel A. Pardo
Las selecciones vascas de fútbol cumplen un siglo de vida. Han pasado cien años de aquel 3 de enero de 1915, cuando un combinado formado por jugadores de las federaciones de Bizkaia, Gipuzkoa y Cantabria vencieron por 6-1 a la selección de Catalunya en el antiguo estadio de San Mamés. Por ello, el artista jarrillero Joseba Gotzon ha elaborado la exposición Ametsen Bila (En busca de los sueños) que recoge los cien años de historia del combinado vasco de fútbol y que tiene hasta el próximo día 9 su primera parada en Mendibile Jauregia de Leioa.
Botas, balones, camisetas, silbatos, telegramas… En esta muestra que acoge el emblemático baserri leioarra, caben infinidad de detalles que son pruebas del pasado centenario de esta selección que busca el camino hacia la oficialidad. “Esta exposición busca que el público conozca la historia de los combinados vascos de fútbol, se acerque a ella y también busca reivindicar la oficialidad de nuestras selecciones”, explica Joseba Gotzon, quien, con el libro Historia de la selección de Euskadi que escribió en 1998 como base, ha elaborado esta muestra en la que hay varias joyas históricas como una réplica de la primera camiseta que vistió el combinado vasco en 1915 frente a Catalunya, el rival que más veces se ha enfrentado a la selección vasca de fútbol con 12 encuentros entre ambas escuadras, incluido el del pasado 28 de diciembre de 2014 en San Mamés.
Aquella elástica, azul celeste, dista mucho de los modelos actuales y no solo por el color, sino por la fisonomía de ese peto con forma de camisa. Si la rigidez de la camiseta y su forma llaman la atención del público, no sorprenden menos las botas que se calzaron los Ibarretxe, Solaun y Peña entre otros en aquel encuentro. “No sé cómo podían jugar con esto”, señala Jon Sánchez, un joven aficionado al deporte y que intenta llevar su mente hacia lo que era el fútbol hace un siglo.
La década de los 10 y los 20 fue gloriosa para el fútbol vasco y así se demostró en los Juegos Olímpicos de Amberes, donde los Pichichi, Belauste, Pagazaurtundua, Artola, Arrate, Egiazabal y Arabolaza lograron la medalla de plata con la selección estatal.
“En aquellos tiempos, Euskadi tenía un gran potencial futbolístico. Varios de los grandes jugadores a nivel mundial eran vascos”, explica Joseba Gotzon. Los años 20 fueron los de la expansión definitiva del fútbol en Euskadi y, con ello, el del desarrollo de la selección vasca de fútbol que compitió bajo los nombres de Selección Norte y Selección Vasca. Llegaron los años 30 y, tal y como se muestra en Ametsen Bila, se denominó a la selección de Euskadi como Vasconia y Euzkadi.
Pero la Guerra Civil supuso un frenazo en el desarrollo del combinado vasco... dentro de las fronteras estatales. Había que emigrar, hacer unas maletas como la que se incluye en esta exposición. Junto a ella, permanecen dos camisetas, una verde y otra roja con las que, en el exilio, jugó la selección vasca organizada por el Lehendakari Agirre. Los Blasco, Iraragorri y Gorostiza entre otros llevaron los colores de Euskadi por Francia, la URSS, Checoslovaquia, Cuba y México.
La victoria del bando franquista fulminó las esperanzas de la selección vasca. No hubo combinado durante 27 años, fue una larga travesía del desierto que Joseba Gotzon ha querido simbolizar con un ligero espacio en blanco. Desde entonces, Euskadi lucha por dar color y forma al sueño de tener una selección oficial.
°
No hay comentarios.:
Publicar un comentario