Bofetada con Guante Blanco

El lehendakari de la CAV quien se encuentra en México asistiendo a un foro con nombre de localidad vasca -Biarritz/Miarritze- ha optado por no responder a la promesa de una 'solución final' para los vascos lanzada por José María Aznar desde - aunque usted no lo crea - Barcelona, la ciudad capital de la secesionista Catalunya.

Lean esto que nos informa La Jornada:

Declina Ibarretxe responder a las críticas lanzadas por Aznar

Arribó, al igual que el juez Garzón, al Distrito Federal

Baltasar Garzón, juez de la Audiencia Española, y Juan José Ibarretxe, presidente de la comunidad autónoma del País Vasco, llegaron anoche a la capital mexicana para participar en el cuarto Encuentro Europa-América Latina, a celebrarse en Valle de Bravo, estado de México.

Ibarretxe rehusó emitir su opinión sobre las críticas del presidente español, José María Aznar, al proyecto para dotar de poderes propios de un Estado independiente al País Vasco.

Sin embargo, Garzón consideró que no es posible conformar una comunidad soberana si no existen condiciones.

"Para que haya cualquier posibilidad de diálogo político y decisiones de ese orden tiene que haber libertad y no deben haber violencia y coacción, extorsión, muertes y persecuciones, como actualmente existen por acción de la organización ETA", señaló.

En esas condiciones "es absolutamente impensable que pueda discutirse una alternativa a la legalidad vigente, al margen de que en ello hay que estar muy atentos a lo que dice la Constitución española y a la propia integridad del gobierno español", argumentó Garzón.

Al cuestionarle sobre el papel que jugará la justicia dentro del cuarto Foro de Biarritz, Garzón consideró que "lo fundamental es buscar fórmulas de cooperación, integración y búsqueda de mayor efectividad (...) para hacer frente a los delitos más complicados, a la delincuencia organizada, el terrorismo y las criminalidades económicas".

El también defensor de los derechos humanos reconoció que actualmente se vive un momento difícil a nivel mundial en la lucha antiterrorista. 

 

 

 
Nótese como Garzón ha desestimado por completo el derecho a la autodeterminación de los pueblos, un derecho que no depende de la actividad de una organización armada como es el caso de ETA, sino de toda una serie de elementos como identidad, costumbres, lenguaje, historia, territorialidad y demás, todo ello contemplado en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de la ONU. 

 

Imaginen entonces con que criterio juzga Garzón a los vascos que son privados de su libertad por trabajar en pos de los derechos arriba mencionados.

¿Garzón defensor de derechos humanos? Difícilmente.

 

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