Garzonada contra Soziedad Alkoholika

Un día más en Euskal Herria, un caso más de represión por parte de Madrid en contra de todo lo vasco, de la mano, por supuesto, de su inquisidor favorito, el juez clown Baltasar Garzón.

La diferencia en esta ocasión es que no se trata de una formación política como Batasuna o un diario en euskera como Egunkaria, sino que, como en el caso de Fermin Muguruza, se trata de un grupo de música; Soziedad Alkoholika.

Aquí lo que nos reporta La Jornada:

Empezarían proceso contra Soziedad Alkoholika por supuesto "enaltecimiento del terrorismo"

Garzón admite querella de asociación de familiares de víctimas de ETA

Armando G. Tejeda | Corresponsal

Sus canciones, de ritmos duros y estridentes, se caracterizan por expresar sus ideas políticas y sus críticas a la sociedad de consumo, al sistema político y a la realidad diaria que ha vivido el País Vasco y su histórico conflicto.

El grupo vasco Soziedad Alkoholika está por estos motivos en la mira del juez de la Audiencia Nacional de España, Baltasar Garzón, quien podría abrir diligencias judiciales en contra de la agrupación por un supuesto delito de "enaltecimiento del terrorismo", caso que recuerda a la censura que sufrieron el año pasado en varias ciudades españolas el también músico vasco Fermín Muguruza y el francés Manu Chao, pese a que todos ellos han condenado los atentados del grupo armado vasco ETA.

La banda punk sufre desde hace varios años ataques y descalificaciones por las letras de sus canciones y los mensajes radicales que lanza en sus conciertos, una vez que la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT, formada por afectados y familiares de los atentados de ETA) considera que "sobrepasan los límites de la libertad de expresión". Este mismo argumento fue el que utilizó para presentar sendas querellas criminales contra Fermín Muguruza y Su Ta Gar.

Soziedad Alkoholika nació en Vitoria en 1988 en el seno del movimiento punk del no future, como parte de una generación que creció en una "crisis económica que condenó al paro (desempleo) a muchos jóvenes, la moda de la heroína y el mal llamado problema vasco", lo que imprimió la esencia de su música "siempre combativa con el poder establecido".

Sin embargo, Garzón admitió a trámite la querella presentada por la AVT y abrió las diligencias judiciales, paso previo a un hipotético procesamiento contra los integrantes del grupo musical. La fiscal Blanca Rodríguez, representante del Estado español en el proceso, presentó como pruebas las letras de algunas de las canciones, al considerar que implican "la humillación e indignación" de las personas afectadas por la violencia etarra.

Parte del expediente

Entre las canciones incorporadas al expediente destacan Explota zerdo, Síndrome del norte y Stop criminalización, en las que se manifiestan frases como las siguientes: "Huele a esclavo de la ley, zipaio, siervo del rey. Lameculos del poder, carroñero coronel ¡explota zerdo!"

Estos mensajes podrían, según la postura de la fiscal, vulnerar el artículo 578 del Código Penal español, que se refiere al "enaltecimiento del terrorismo".

Otra de las canciones que consideran "sobrepasa el límite de la libertad de expresión" es Stop criminalización, en la que el grupo vasco denuncia: "Su estrategia para acabar con la disidencia es muy simple; es mezclarla con la violencia. Todos somos terroristas para los fascistas".

Ante la campaña de acoso y desprestigio, que ha provocado la suspensión de conciertos, Soziedad Alkoholika difundió varios comunicados en los que manifiesta con nitidez su postura ante el polémico conflicto vasco: "Nunca hemos tenido ningún problema para actuar en libertad, nunca hasta mayo de 2002, cuando en la emisora de radio Onda Cero uno de sus contertulios matinales se hizo eco de unos anónimos que circulan por Internet y afirmó que apoyábamos a ETA y manipuló las letras de algunas de nuestras canciones con el fin de dar credibilidad a tales anónimos. La inmediata consecuencia fue la cancelación de bastantes conciertos que teníamos previstos. Por supuesto nadie quiso divulgar nuestra postura contraria a la violencia de ETA, que ya habíamos manifestado mucho antes y sin ningún tipo de presión".

Los músicos vascos añadieron que "mostrar aversión hacia la policía, los militares, el gobierno o expresarnos de forma políticamente incorrecta no significa que apoyemos a ETA, pero parece ser que actualmente ser vasco y tener letras en contra de la policía es lo mismo que apoyar a ETA". 

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