Ponencia sobre Memoria y Convivencia Paralizada

Los españolistas del PP y el PSOE se han quedado sin argumentos para continuar dinamitando la vida diaria de los habitantes de la CAV tras el desarme de ETA. Sus aliados colaboracionistas del PNV no aciertan a resolver como actuar en el actual panorama. Así, los subterfugios creados exprofeso para mostrar un cierto rubor ante el relato que surge a partir de los excesos represivos llevados a cabo por Madrid en suelo vasco se muestran inoperantes si no es que innecesarios.

La izquierda abertzale los tiene arrinconados, los ha emplazado a quitarse los antifaces pseudo-democráticos.

Les invitamos pues a leer este artículo en Deia:

La ponencia de convivencia del Parlamento Vasco se resitúa tras el desarme de ETA

El foro parlamentario sigue en compás de espera casi dos meses después de su constitución

Míriam Vázquez

Los últimos acontecimientos relacionados con el desarme de ETA, y la tensión política que han suscitado los debates parlamentarios en materia de paz y convivencia han provocado que, casi dos meses después de que el Parlamento Vasco reactivara la Ponencia sobre Memoria y Convivencia, aún no se haya producido la reunión fundacional para fijar un calendario de trabajo y comenzar a perfilar la metodología. Por un lado, la noticia del desarme instaló cierta sensación de provisionalidad en la actualidad política, y propició que los partidos se colocaran a la expectativa de los cambios históricos que pudieran registrarse y se resituaran ante el nuevo contexto. Por otro lado, el debate sobre la convivencia llevaba semanas caldeando los plenos parlamentarios con posiciones muy enfrentadas entre el PP y EH Bildu a cuenta de los homenajes a miembros de ETA en algunos institutos o los planes de deslegitimación del terrorismo, lo que aconsejaba esperar a que las aguas se calmaran. Los populares no están en la ponencia, pero se asume que el clima de tensión no va a beneficiar a nadie y provocaría que la disputa se trasladara a los plenos parlamentarios.

Cuando están a punto de cumplirse dos meses desde la jornada de constitución de la ponencia el 8 de marzo en el seno de la Comisión de Derechos Humanos, se desconoce qué comparecencias de expertos y qué informes pedirán los grupos. Todo está por hacer. Lo único claro es que los ejes del debate serán la deslegitimación del terrorismo y la violencia, y una nueva política penitenciaria. Según las fuentes parlamentarias consultadas, no se vislumbra una convocatoria de reunión inminente y de momento nadie ha presionado en tal sentido porque el convencimiento general pasa por que los trabajos deben desarrollarse con ritmo pausado para propiciar el consenso en una materia tan sensible. No obstante, no se descarta que haya novedades. Hoy mismo, EH Bildu tiene previsto ofrecer una comparecencia sobre la ponencia. No hay que descartar que el debate tome velocidad tras el parón vacacional de Semana Santa y una vez culminado el desarme.

El ritmo de este foro contrasta con la ponencia que busca un nuevo estatus de autogobierno, que se está reuniendo periódicamente para acoger comparecencias de expertos y hoy volverá a hacerlo. Desde el PNV creen que puede deberse al desarme y a la necesidad de calmar las aguas, un análisis que también realizan los socialistas. Este parón, por tanto, sería provisional. Desde el PSE, en cualquier caso, quieren trabajar con tiento. Asumen que cualquier palabra sobre la política penitenciaria puede ser malinterpretada en algunos colectivos de víctimas, y no quieren que se sientan heridos por las reflexiones de la ponencia. Cuidarán el lenguaje y evitarán dar pasos en falso, aunque coinciden en la necesidad de revisar la política aplicada a los presos siguiendo criterios legales, y quieren cerrar el traspaso íntegro de las prisiones a la comunidad autónoma. Creen que los trabajos van a avanzar con suavidad y que primero debe “calmarse un poco” el debate político.

A partir de ahí, se desconoce qué informes o comparecencias se pedirán. El trabajo va a articularse en torno a dos grandes bloques: la convivencia y la política penitenciaria. En el aire está planeando la idea de que, por lógica, se van a pedir informes a la Secretaría de Paz y Convivencia de Jonan Fernández, porque es quien dirige las políticas de memoria en la comunidad autónoma. También podrían reclamarse al Instituto de la Memoria, Gogora. En materia penitenciaria, las cuestiones que están ahora mismo en el candelero político son la petición de la transferencia de prisiones al Estado, una nueva política penitenciaria, y la elaboración de un decreto de reinserción en el Gobierno vasco. La petición de informes a Madrid se perfila ya como uno de los puntos de mayor trasfondo político.

En paralelo al compás de espera en la ponencia, EH Bildu ha registrado una petición en el Parlamento que ha causado sorpresa porque incurre en una duplicidad con estos trabajos. La coalición abertzale ha presentado una proposición no de ley para crear una ponencia sobre el traspaso de prisiones y la política penitenciaria que se aplicaría desde suelo vasco en el seno de la Comisión de Trabajo y Justicia.

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