Siempre lo hemos dicho, las asociaciones de "víctimas de ETA" no son mas que grupos de choque al servicio del régimen español. Sus integrantes son galantemente remunerados para decir lo que los gerifaltes borbónico-franquistas no pueden decir pues están obligados a guardar ciertas formas frente a las diferentes instituciones supranacionales.
El lenguaje de odio que acostumbran utilizar muestra claramente que ellos no quieren justicia, quieren venganza. Si de ellos dependiera, los paseillos y fusilamientos que caracterizaron a la España de sus padres y de sus abuelos sería la solución para lidiar con el independentismo vasco.
Repetimso, Consuelo Ordoñez y compañía no quieren justicia, si así fuera, estuvieran exigiéndola para las miles de víctimas del franquismo. No, lo que quieren es venganza, sentimiento siempre a flor de piel en el españolismo, tal como estamos presenciando en el caso del niño Gabriel Cruz. De ahí la chulesca bravuconería con la que han respondido a la invitación por parte de los Artesanos de la Paz.
Les dejamos con esto dado a conocer por Naiz:
Covite ha enviado una carta a los artesanos de la paz Michel Tubiana y Txetx Etcheverry en la que rechaza la invitación a mantener una reunión que, según la presidenta de la agrupación, Consuelo Ordóñez, le habían hecho llegar.Según se desprende de la misiva rubricada por Ordóñez, dirigida a Michel Tubiana y Txetx Etcheverry, Covite recibió una invitación para mantener una reunión con los artesanos de la paz. La agrupación de víctimas de ETA ha respondido con una negativa. La presidenta de la asociación les agradece en primer lugar haberse puesto en contacto con Covite y, acto seguido, añade que, «en algún momento» ha pensado que «se habían confundido de interlocutor: ustedes utilizan términos como ‘paz’ y ‘conflicto’ que en ningún momento se ajustan a la realidad que hemos vivido y padecido gracias a ETA y a su entorno».Ordóñez les recuerda que recientemente se ha reunido con el diputado de En Marche Vicent Bru y el senador de Les Républicains Max Brisson –miembros de la delegación que negocia con las autoridades francesas– y que próximamente lo hará con el alcalde de Baiona, Jean-René Etchegaray, destacando que «ninguno de ellos está imputado por la comisión de un delito». En ese sentido, les dice a Tubiana y Etcheverry que «ustedes sí lo están, ya que la justicia francesa les investiga por la destrucción de armas de ETA en Luhuso en diciembre de 2016».Consuelo Ordónez afirma que el único encuentro que Covite desea tener con ellos «debe producirse en los tribunales». Eso sí, les dice lo que aceptarían de los artesanos de la paz sería «la información privilegiada sobre la remesa de armas, que según ustedes representaba el 15% del arsenal de ETA, y que estaba en su poder ese diciembre de 2016».«Querríamos saber qué miembros de ETA se las entregaron. Como les hemos expuesto, es una cuestión de vital importancia dado el elevado número de crímenes de la organización terrorista sin resolver», concluye.
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