Una de las mejores noticias que hemos recibido nos llega por vía de El Nacional.
Resulta que el monarca franquista ha decidido mostrar abiertamente su animadversión hacia vascos y catalanes al negarse a incluir a los políticos que les representan -los independentistas o por lo menos autonomistas, claro- en la lista de quienes van a "tener el privilegio" de estar con el Rey de los Drones, Barack Obama durante su visita al estado español.
Osease, al fascismo estadounidense y al fascismo español les molesta por igual el reto que representan los pueblos sin estado a la hegemonía neoliberal cimentada en la noción del estado autoritario.
Aquí la nota:
El rey Felipe VI ha decidido excluir de la comida oficial con el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, a los representantes de los partidos nacionalistas catalanes y vascos. Según la Casa Real, el motivo de no invitarlos -cómo sí ha hecho con representantes de otras fuerzas políticas- radica en el hecho de que la visita de Obama no tiene rango de visita de Estado sino únicamente visita oficial, razón por la cual no es obligatorio invitar a todos los partidos con representación al Congreso.
El presidente de los EE.UU. tiene previsto realizar una visita al Estado español entre los días 9 a 11 de julio, con el gobierno español en funciones y a pocos meses de abandonar la Casa Blanca y dar por finalizados ocho años en el cargo.
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