Los españolazos están molestos por que han quedado expuestos ante la comunidad internacional como una clase política siniestra y vengativa, pero lejos de enmendar sus pasos, dan más muestras de su mendaz conducta, esta vez aplicando otra vuelta de tuerca en contra de la juventud vasca representada en el colectivo Segi.
Esta nota publicada en El Imparcial (con su muy parcial estilo editorial) nos cuenta de ello:
La Audiencia Nacional envía a prisión a seis miembros de Segi
La Audiencia Nacional ha condenado a penas de entre seis años y seis años y medio de prisión a seis jóvenes por pertenecer a la organización juvenil ilegalizada Segi, mientras que ha absuelto a otros 11 acusados ya que no ha quedado acreditado que realizaran acciones que contribuyeran a sus actividades terroristas.
En una sentencia notificada este lunes, la sección primera de la sala de lo penal de este tribunal condena a Xabier Lujambio (6 años y medio), Maitane Linazasoro (6 años y 3 meses), Iosu Arruabarrena, Aitor Alberdi, Aitor Franco y Arkaitz Antza (todos ellos a 6 años) como autores de un delito de integración en organización terrorista.
Sobre los once absueltos, la sala considera probado que algunos eran miembros de Segi cuando fueron arrestados o "simpatizantes del radicalismo independentista vasco", si bien estima que no ha quedado suficientemente acreditado que realizaran "actos concretos que favorecieran los fines ilícitos de dicha organización".
Según establece la sentencia, los seis condenados eran "miembros activos" de la organización juvenil cuando los detuvieron pese a que todos ellos "conocían" que Segi había sido declarada ilegal por el Tribunal Supremo por su vinculación con Eta.
En concreto, los magistrados sitúan a Lujambio como el encargado de captar, adoctrinar y planificar actividades en las que intervenía para conseguir "más adeptos y radicalizar a nuevos jóvenes", además de aleccionar a los miembros recientes sobre medidas de seguridad y precauciones que debían adoptar.
El tribunal, integrado por el presidente Javier Gómez Bermúdez y los magistrados Manuela Fernández Prado y Javier Martínez lázaro, destaca que Alberdi realizaba labores de propaganda y proselitismo y participaba en las reuniones que se celebraban en el gaztetxe (local juvenil) de Rentería (Gipuzkoa) y detalla que, junto a Antza y Franco, hizo una pintada amenazando a un ertzaina en la puerta del domicilio de éste.
Por su parte, Arruabarrena pegaba carteles y Antza elaboraba pancartas en favor de los fines de Segi, mientras que Franco vendía boletos de la organización juvenil para obtener fondos con los que financiar las ilícitas actividades y entregaba el dinero obtenido a Linazasoro, que era la tesorera.
Además, la sala recuerda que en los registros practicados en los domicilios de los acusados se incautaron de abundante material relacionado con Segi y otras organizaciones ilegalizadas, así como folletos, pegatinas, material audiovisual e información sobre diversos actos desarrollados por la organización.
Los once absueltos son: Imanol Sagarzazu, Haizea Iriarte, Beñat Burlada, Alexander Etxeberria, Egoitz Urbe, Hodeiertz Urain, Alain Luna, Iker Zabala, Oinatz Arbelaiz, Oihana Mugika y Gaizka Ibeas. Durante el juicio, celebrado el pasado mes de julio, la Fiscalía pidió para cada uno de los acusados 8 años de cárcel.
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