El mojado continúa en su cómodo inmovilismo, para beneplácito de Madrid y en detrimento del proceso de autodeterminación de Euskal Herria.
Les compartimos esta nota publicada en Naiz:
Sortu reprocha al lehendakari que no quiere «plantar cara» a Madrid
El portavoz de Sortu, Pernando Barrena, ha criticado que la «soberbia» de Iñigo Urkullu «no tiene límites» respecto a los planes presentados por el Gobierno de Lakua acerca de los presos y el desarme de ETA y ha lamentado la «desgracia» de tener un lehendakari que «se dedica a contemporizar con el PP en vez de presionarle políticamente para que repatrie a los presos».
Pernando Barrena ha tomado la palabra finalizada la movilización convocada por Sortu bajo el lema «Stop a la política penitenciaria criminal. Presoak Etxera», frente a la prisión de Martutene. Previamente, han partido sendas marchas desde Donostia y Hernani que han concluido en la cárcel donostiarra.
En su intervención, el dirigente de Sortu ha criticado que «no hay semana en que no haya un nuevo plan de Lakua o un nuevo anuncio mediático cuya eficacia no va más allá de la rueda de prensa».
A su juicio, la «soberbia» del lehendakari y del secretario de Paz y Convivencia del Gobierno de Lakua, Jonan Fernández, «no tiene límites» porque «han hecho un plan para los presos, sin contar con los presos, otro para las víctimas, contando solo con una parte de las víctimas, y la semana pasada otro para el desarme de ETA sin contar con ETA, ni tampoco con los verificadores internacionales».
˜Tenemos la desgracia de tener un lehendakari en Gasteiz que se dedica a contemporizar con el PP en vez de presionarle políticamente para que repatrie a los presos, que no quiere ni oír hablar de acuerdos políticos con los soberanistas en casa porque no quiere plantar cara a Madrid», ha censurado.
Asimismo, Barrena se ha referido al encuentro que el lehendakari y el president de Catalunya, Artur Mas, celebran este domingo en Ajuria Enea para destacar que Urkullu «ha abandonado a los catalanes y huye del espejo catalán porque eso supone confrontar con el constitucionalismo español».
Por ello, ha insistido en que es «una desgracia» que Urkullu se comporte de esa manera porque «lo que está provocando es que el PP y el Gobierno español actúen a sus anchas para boicotear la paz y el proceso de resolución».
En su opinión, si Urkullu realmente quisiera ser un «activo» para la solución «ayudaría y mostraría su apoyo a los verificadores para completar sus objetivos», al tiempo que «presionaría con fueza al Gobierno del PP para que se implique en el proceso de desarme», así como para acabar con la actual política penitenciaria y respetar los derechos de los presos.
El dirigente de Sortu ha mostrado la disposición de la izquierda abertzale para «buscar acuerdos que tengan como objetivo multiplicar la presión política frente a los que obstaculizan la paz».
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