No ha sido suficiente con la sacapela a manos de los jueces de Schlewsig Holstein, ahora también la ONU interviene en favor de los catalanes exigiendo al régimen borbóico franquista que se abstenga de imputar a los líderes apresados, en el exilio o aguardando juicios de extradición con el supuesto delito de rebelión.
Lean ustedes esta nota generada por El Diario:
El relator especial de Naciones Unidas para Libertad de Expresión y Opinión, el estadounidense David Kaye, ha pedido a las autoridades españolas que se “abstengan” de continuar con sus intentos de acusar de delito de rebelión a los políticos catalanes, sobre todo teniendo en cuenta que dichas acusaciones pueden implicar una condena de hasta 30 años en prisión.“Las sentencias por delito de rebelión que puedan suponer extendidas condenas de cárcel suponen un riesgo muy grave para el ejercicio de la libertad de expresión, incluso cuando implica controversia e incomodidad para ciertos sectores”, ha declarado Kaye en un comunicado publicado por el Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas.“La libertad de expresión es la piedra angular de cualquier sociedad libre y democrática y continuará siéndolo cuando las controversias actuales acaben difuminándose”, ha añadido.“Me preocupa de sobremanera que las acusaciones por delito de rebelión presentadas a raíz de actos que no implican ni violencia ni incitación a la misma puedan interferir con los derechos de la sociedad a protestar y manifestarse”, ha emplazado Kaye. “El Derecho Internacional establece que -especialmente en aquellas situaciones que impliquen oposición política- sólo se deberían imponer restricciones cuando sea estrictamente necesario y de manera proporcionada”, ha añadido.
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