Tal como lo dice el título de esta entrada y como lo habíamos avisado con antelación, un grupo de eurodiputados ya se encuentra en Euskal Herria para conocer de primera mano el impacto que tiene sobre la sociedad vasca, específicamente en lo que respecta a los presos políticos (que no "presos de ETA", por más que insistan los medios de comunicación pues no todos ellos son o fueron militantes de la organización armada) y a sus familias, pero también del común de la sociedad vasca.
Esta medida de excepción practicada por el estado español y por el estado francés en se suma a las muchas otras que se han implementado para entorpecer y obstaculizar el quehacer político del pueblo vasco, baste recordar la retrógrada Ley de Partidos Políticos con la que se ilegalizó a varias formaciones políticas vascas como Batasuna, EHAK y ANV, estrategia represiva que equipara al régimen español con el de la Sudáfrica del apartheid.
Así pues, aquí les compartimos la nota publicada en el Diario de Navarra:
Varios eurodiputados, "preocupados" por la dispersión de presos de ETA
Eurodiputados de distintos grupos políticos se ha reunido con parlamentarios navarros de todos los partidos, salvo UPN, PSN y PPN
Europarlamentarios de distintos grupos políticos que realizan una visita al País Vasco y Navarra para examinar la situación de los presos de ETA se han mostrado "muy preocupados" ante la dispersión de estos reclusos, al considerar que es "un castigo colectivo, no ya a los presos, sino al resto de su entorno".
Así lo ha manifestado la miembro del partido Sinn Fein y europarlamentaria por Izquierda Unida Europea (GUE), Martina Anderson, quien ha visitado el Parlamento de Navarra junto a la europarlamentaria letona de Los Verdes Tatjana Zdanoka, en representación del grupo de siete europarlamentarios que visitan desde este pasado domingo y hasta este martes el País Vasco y Navarra.
La delegación, que tiene previsto reunirse con Etxerat, está formada, además de por Anderson y Zdanoka, por Gabriele Zimmer (GUE), Josep-Maria Terricabras (ERC), Lidia Senra (Alternativa Galega de Esquerda en Europa), Malin Björk (GUE), y el belga Mark Demesmaeker (Conservadores y Reformistas Europeos).
Anderson y Zdanoka han sido recibidas por la presidenta de la Cámara navarra, Ainhoa Aznárez, y han participado en un acto al que han asistido representantes de todos los grupos parlamentarios salvo de UPN, PSN y PPN. A las 12.30 horas han mantenido una reunión de trabajo con portavoces de la Comisión de Relaciones Ciudadanas e Institucionales de la Cámara navarra, a la que tampoco han asistido parlamentarios de UPN, PSN y PPN.
En su intervención, Anderson ha afirmado que la dispersión "es un impacto tremendo porque es un castigo colectivo, no ya a los presos, sino al resto de su entorno, con consecuencias como muertes en la carretera". La irlandesa ha dicho que por este motivo se encuentran realizando este viaje, en el que quieren "hablar con diferentes fuentes para ver si hay alguna posible violación de Derecho Internacional". "Por eso estamos tan agradecidos de que nos reciban en el Parlamento de Navarra", ha agregado.
Anderson ha explicado que tras un encuentro con representantes de Etxerat en marzo de 2015 estos europarlamentarios se quedaron "muy preocupados por el tratamiento" que, según esta asociación, "recibían los presos y sus familiares y allegados".
"Nos comentaron cómo pedían desde hace tanto tiempo el acercamiento, nos hablaron de la política de dispersión, de que se estaban conculcando derechos fundamentales. Estamos muy preocupados, sobre todo porque la decisión que hemos tomado nosotros o quien la tome no tiene por qué salpicar a las familias", ha afirmado la europarlamentaria, que ha relatado que ella estuvo presa durante 13 años y medio, de los cuales 10 estuvo en Inglaterra. Sus familiares y amigos, ha indicado, "tenían que desplazarse toda esa distancia" para ir a verla y "otras muchas familias estaban en esa situación".
Aznárez defiende "una paz que respete la dignidad"
Por su parte, la presidenta del Parlamento de Navarra ha trasladado a las dos europarlamentarias "el apoyo de la mayoría de la Cámara en la labor de lograr la paz y la convivencia, dentro del compromiso de este Parlamento con la paz, la normalización y la convivencia democrática, entendiendo que su presencia va encaminada a trabajar por esa vía de favorecer la paz y la convivencia en nuestra sociedad".
A juicio de Aznárez, "esa paz debe estar basada en el respeto escrupuloso de la dignidad de las personas y de todos los derechos humanos fundamentales, una voluntad proclamada en distintas ocasiones por este Parlamento y convertida en compromiso con la paz y el rechazo al uso de la violencia con fines políticos, sea ésta de ETA, de grupos de ultraderecha, de funcionarios del Estado, así como de cualquier otro origen".
Por último, ha deseado que la reunión con portavoces de la Comisión de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Parlamento de Navarra "sea fructífera y un paso más para lograr la convivencia en paz en esta sociedad que tanto ha sufrido".
Queremos entender que ya la misma negativa por parte los navarricos pertenecientes a los partidos "de ámbito estatal" le estará diciendo a los europarlamentarios cuán profundo corre el rencor de estas formaciones políticas hacia el entorno social de los presos políticos.
Además, no hay necesidad de ser genios para entender que esta medida tomada por el poder judicial tiene un fuerte arraigo en el poder legislativo, lo cual es una seria lesión a la muy democrática división de poderes, y que esto está sucediendo en el perímetro mismo de la Europa civilizada y defensora de las garantías individuales.
Por último, la negativa de los del UPN, PP y PSOE (así, sin la N) a reunirse con representantes de la Eurocámara es por lo menos una violación flagrante a los protocolos diplomáticos dictados por la relaciones internacionales vigentes.
Así que...
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