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domingo, 7 de octubre de 2007

Reacciones a los Secuestros

En respuesta a la apuesta por la paz por parte de la sociedad vasca y emulando al régimen militar de Rangún, Madrid ha decidido a apostar por la confrontación, la represión y la ilegalidad.

En una nota publicada hoy por La Jornada se habla de las reacciones a los secuestros (no se les puede llamar detenciones por estar inscritas en un operativo de claro corte fascista) generadas a lo largo y ancho de Euskal Herria:

Manifestaciones en Bilbao, San Sebastián y Pamplona

Miles repudian el operativo judicial contra la izquierda separatista vasca

Armando G. Tejeda (Corresponsal)

Madrid, 6 de octubre. Miles de personas se manifestaron hoy en Bilbao, Pamplona y San Sebastián para protestar por el operativo judicial y policial del pasado jueves contra dirigentes de la izquierda separatista vasca, que se saldó con 23 detenciones, todos ellos líderes de la ilegalizada coalición Batasuna.

Representantes de esta formación política, considerada por el gobierno español el brazo político de la organización armada Euskadi ta Askatasuna (ETA, Tierra Vasca y Libertad), advirtieron que las aprehensiones suponen una “declaración de guerra contra el independentismo vasco”.

Baltasar Garzón, juez de la Audiencia Nacional, ordenó y coordinó el operativo con que se habría descabezado la dirigencia de la coalición abertzale (nacionalista).

El acoso a la izquierda abertzale aumentó cuando la organización armada vasca ordenó la ruptura de la tregua unilateral y del proceso de paz iniciado con el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, en junio pasado.

En lo que va del año han sido detenidas 172 personas vinculadas con ETA o próximas a la izquierda abertzale, incluidos los 23 detenidos el pasado jueves.

En respuesta a estas detenciones, unas 3 mil personas se manifestaron en Bilbao y otras 2 mil en San Sebastián para exigir un “marco democrático para Euskal Herria” y “abrir la puerta de la independencia”.

En Pamplona, la capital de Navarra, donde no se autorizó la manifestación, unas 300 personas fueron dispersadas por agentes antidisturbios.

A las concentraciones populares acudieron dirigentes de la ilegalizada formación política, así como líderes del sindicato nacionalista LAB, incluido su secretario general, Rafa Díez Usabiaga.

Antes de las manifestaciones, 81 personas que tuvieron cargos en la izquierda abertzale en los últimos 25 años, encabezados por Pernando Barrena, actual vocero de la organización, advirtieron que la acción policial del pasado jueves “es una declaración de guerra en toda regla del gobierno español al independentismo vasco”.

Barrena también responsabilizó al Partido Nacionalista Vasco, actualmente en el gobierno autonómico, por su supuesto apoyo a Madrid.


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