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miércoles, 24 de octubre de 2007

La Fraternidad Francesa

Con el fascista Nicolas Sarkozy colaborando estrechamente con el fascista Juan Carlos Borbón es que se pueden presentar instancias en que un joven vasco para el que se piden casi 112 de prisión por una rueda de prensa sea entregado por el estado francés al español de acuerdo con esta nota:

El Estado francés da luz verde para que el donostiarra Asier Tapia sea entregado a Madrid

El Tribunal de Apelación de Pau ha resuelto que el joven donostiarra Asier Tapia sea entregado a Madrid después de que la Policía francesa le arrestara el pasado 2 de octubre en las cercanías de Hendaia en base a una euroorden española. La defensa puede recurrir todavía.

La Sala de Instrucción del Tribunal de Apelación de Pau ha hecho suya la euroorden española contra Asier Tapia y resolvió ayer entregar al preso donostiarra, al que Madrid acusa de ser representante de la organización juvenil Segi.

En la vista llevada a cabo ayer en el Tribunal de Pau, el magistrado aceptó la tesis de la Fiscalía y secundó su petición de dar luz verde a la euroorden emitida por la Audiencia Nacional, por la que reclama a Asier Tapia, según difundieron las agencias, «por hechos de terrorismo».

El donostiarra fue arrestado el pasado 2 de octubre en el tramo entre Biriatu y Hendaia, y enviado directamente a prisión.

La defensa puede recurrir

Aunque el tribunal haya resuelto entregar al vecino de Donostia al Estado español, su defensa puede aún recurrir el fallo.

La Audiencia Nacional ordenó la detención de Asier Tapia después de que no compareciera en febrero de 2005 a un juicio en el que la Fiscalía española pedía contra el joven donostiarra nada menos que 111 años y 10 meses de prisión por los supuestos delitos de «integración en banda armada», «daños» e« incendios terroristas».

La imputación del joven donostiarra se basa en una simple rueda de prensa. El caso se retrotrae al 6 de marzo de 2001, día en el que compareció ante los medios para denunciar la detención de quince jóvenes vascos acusados de pertenecer a la organización juvenil Haika.

El donostiarra fue detenido días después por la Policía española, cuando se dirigía a su domicilio. El juez Baltasar Garzón ordenó su ingreso en prisión, donde permaneció entre marzo y octubre de 2001. Después de abonar una fianza económica que ascendió a los 30.000 euros, recuperó la libertad.

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