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El diputado navarro de Amaiur, Sabino Cuadra, ha acusado hoy al Gobierno de estar intentando “reventar el proceso de paz” y ha considerado “puro sadismo” y “venganza cobarde” la política de dispersión de presos de ETA, que “busca castigar a sus familiares”.
En su discurso en el debate del estado de la nación, Cuadra ha asegurado que en “Euskal Herria hoy tan solo queda un tipo de violencia política: la del Estado” y se ha referido a “la violencia de las ilegalizaciones, las detenciones, la tortura, la cárcel o los tribunales de excepción”, entre otras.
Cuadra ha dicho a Rajoy que de nuevo “ha desaprovechado” el año para abrir las puertas al acercamiento de presos de ETA porque “estaban más cómodos en el anterior escenario” y “el de ahora no les favorece nada”.
Por el contrario, ha dicho Cuadra, “existe otra vía” que es la del “diálogo y el reconocimiento mutuo de la violencia habida”. “De todas las violencias y de todas las víctimas”, ha subrayado.
Esta vía, según el diputado de Amaiur deberá mirar “más al futuro que al pasado” y acordar unas “bases firmes para que lo ocurrido no vuelva nunca a suceder”.
A su juicio, “los derechos y libertades democráticas se supeditan a la suprema divinidad de la seguridad ciudadana, la seguridad ciudadana se supedita a criterios policiales y los criterios policiales a los intereses políticos de Gobierno”.
Desde la tribuna del hemiciclo, Cuadra ha asegurado que “ante un régimen en profunda crisis, comienza a hablarse de la necesidad de una segunda transición y un proceso constituyente”.
Al respecto, ha destacado que “la transición dejó anclado el actual régimen a pilares esenciales del anterior” y se ha referido a una “monarquía instaurada por el genocida Franco, un Ibex-35 heredero de quienes medraron al amparo de un régimen negador de libertades sindicales y derechos sociales y una jerarquía eclesiástica que bendijo todo aquello”.
En su opinión, el trato dado al proceso soberanista catalán “indica claramente que esos anclajes autoritarios y centralistas siguen vigentes” porque “se niega el derecho a decidir, a consultar o a impulsar procesos participativas”, así como “todo tipo de diálogo al amparo de una soberanía estatal única”.
Por ello, Cuadra ha asegurado que “cualquier salida a la actual crisis que no esté asentada en una ruptura democrática, en un cambio social profundo y en el reconocimiento del derecho a decidir” será “al igual que ayer, un fraude inaceptable”, que ellos rechazarán “frontalmente”.
Cuadra ha precisado que “el cambio será una realidad en Euskal Herria” y nadie decidirá por ellos.
El diputado de Amaiur ha preguntado a Rajoy por qué ayer en su discurso no habló del proyecto de ley del aborto, algo que, según le ha dicho, “se tuvo que tragar con patatas y ministro Gallardón incluido”, ni tampoco “prácticamente nada” de la corrupción.
En este sentido, ha asegurado que “la corrupción es estructural” y acabar con la misma “sin impulsar la ruptura democrática con este régimen es imposible”.
Ha comenzado su discurso hablando de recuperación y ha preguntado “¿de quiénes?” porque mientras “las multinacionales del Ibex-35 siguen forrándose”, la “gente de abajo” tiene “pocas” alegrías.
Según Cuadra “la contrarreforma del PP ha tenido dos fases”, en la primera se vio “su cara antisocial” con los recortes, y en la segunda se está viendo “cómo se estrujan las libertades democráticas y se recortan los derechos humanos”.
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