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sábado, 5 de septiembre de 2015

El Cid Bellalta

Por correo electrónico nos han hecho llegar el enlace a esta joya del españolismo cutre publicada en el portal de Alerta Digital:


El presidente del Partit Espanyol de Catalunya (PEC), Gerard Bellalta, ha alertado hoy sobre la indefensión de Cataluña frente a la islamización que padece “si el resto de España decide no intervenir”. Advierte el líder españolista que Cataluña ha pasado de tener 30.000 inmigrantes musulmanes hace 15 años a tener actualmente más de 500.000 y a contar con casi 300 oratorios islámicos. A esta cifra añade la estimación oficial de un 15% de no empadronados, más los que han llegado a Cataluña en los últimos seis meses y todavía no figuran empadronados por el retraso en el padrón a ser incluidos en el INE.

Por todo ello, Bellalta advierte acerca de la configuración de un territorio de mayoría islámica si su comunidad autónoma sigue adelante con su procceso rupturista. “¿Quién va a defender a los catalanes de una islamización segura sin el resto de España?”, se pregunta el político y empresario, quien añade a continuación que “la mayoría de los separatistas catalanes son homosexuales androgenados, drogadictos y gente de mal vivir”. Y apostilla: “¿Alguien en su sano juicio puede llegar a confiar en esta gente para detener a los islamistas?”.

Para Bellalta, el apoyo de los musulmanes al soberanismo catalán obedece a razones de cálculo: “Los islamistas saben que una Cataluña sin España sucumbiría con la misma facilidad que una ovejita en medio de un rebaño de lobos”.

El dirigente del PEC recuerda que, en junio de 2004, el Parlamento de Cataluña y la Cámara de Representantes de Marruecos firmaron un documento oficial, en el que se hablaba textualmente, de apoyar la inmigración magrebí a cambio de favorecer las inversiones catalanas en Marruecos.

“En 2001, con Jordi Pujol (CiU) al frente de la Generalitat, se inició un claro cambio de tendencia. Pujol visitó a Mohamed VI en Marruecos para iniciar un proceso de colaboración y acuerdos mutuos. Paralelamente, la llegada de inmigrantes magrebíes y argelinos aumentó en esos años. En 2003, el Gobierno catalán liderado por CiU abrió la primera oficina de selección y contratación de inmigrantes en Marruecos, Artur Mas fue el encargado de inaugurar la oficina”, explica Bellalta.

Aunque la mayoría de inmigrantes musulmanes trasladados a Cataluña siguieron inicialmente una línea moderada, la inmigración masiva provocó la llegada de imanes salafistas que lograron radicalizar a musulmanes moderados. En ese sentido, a finales de 2004 la Guardia Civil desmembró una célula compuesta por tres islamistas y que estaba asentada en los municipios de Sant Andreu de la Barca y Mollet del Vallés.

Según los datos extraídos de las últimas publicaciones del INE, hoy residen en Cataluña más de 500.000 musulmanes. De ellos figuran empadronados 291.001 marroquíes, 72.982 pakistaníes, 19.330 argelinos, 16.790 de Mali, 12.505 mauritanos y 31.012 del resto de comunidades africanas que profesan la religión mahometana. Por otra parte, hay que sumar la estimación oficial de un 15% de no empadronados, más de entre el 2% y 3% de aquellos que han llegado a Cataluña en los últimos seis meses y todavía no figuran empadronados por el retraso en el padrón a ser incluidos en el INE.






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