Nos dicen José Saramago y Manuel Vázquez Montalbán que los votantes de la CAV debieran optar por Izquierda Unida ya que son la única opción de izquierda no nacionalista por ser una coalición de comunistas y republicanos.
Desde este humilde blog publicado desde la diáspora vasca para la diáspora vasca pediríamos a ambos intelectuales una reflexión muy profunda acerca de un hecho incontestable; su mensaje empata perfectamente bien con el del españolismo manipulador de Vidal de Nicolás y ahora, con el de Antonio Rouco Varela en un todo vale contra el pueblo vasco siempre y cuando disfraces tu mensaje con un discurso anti ETA.
Y pues nada, que resulta que después de varias semanas de desencuentros, José María Aznar ha logrado disciplinar a la cúpula eclesial católica española que, reculando un poco de aquello de las excomuniones, deja claro que quien desee la autodeterminación del pueblo vasco no merece ser llamado cristiano... amén.
Más aún, en el comunicado por parte de la Conferencia Episcopal Española, Rouco Varela habla de que "el terrorismo apareció hace 30 años" refiriéndose a la actividad armada de ETA. Pues bien, hace 30 años era 1971... y Francisco Franco aún estaba al frente de la dictadura, con Juan Carlos Borbón ya como Príncipe de España.
Esto es lo que nos reporta La Jornada en su sección Mundo:
Ofrece una "colaboración leal" a José María Aznar
Evitar cualquier tipo de colaboración con ETA, pide la Iglesia a españoles
La Iglesia católica española manifestó este lunes su profunda preocupación por "el gravísimo problema del terrorismo" y llamó a evitar cualquier tipo de colaboración con la organización armada vasca ETA.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, cardenal Antonio María Rouco, ratificó la voluntad de la jerarquía eclesiástica para mantener una "colaboración leal" con el gobierno del presidente conservador José María Aznar, y sentenció: "No es lícito colaborar de ningún modo con ETA o con su entorno. Quienes lo hicieran no merecerían el nombre de cristianos".
Por el contrario, agregó, es "obligación moral de todos colaborar con todos los hombres de buena voluntad... en la protección de los amenazados y en la erradicación de los crímenes terroristas".
Durante la inauguración de la asamblea plenaria de los obispos españoles, Rouco dijo que "el gravísimo problema del terrorismo" ha sido una de las preocupaciones principales de la Iglesia española desde que apareció hace 30 años, en respuesta a las críticas que ha recibido por la condena "tibia" de los obispos españoles a las acciones del grupo separatista vasco, que en 1999 anunció el fin de una tregua unilateral que duró 14 meses.
Rouco señaló que no son las críticas sobre la "tibieza" las que "más nos han hecho sufrir", sino "las informaciones y opiniones desorbitadas, y no pocas veces malevolentes e hipócritas, relacionadas con los tristísimos, pero contados, casos de abusos sexuales, perpetrados por unos cuantos clérigos en algunos lugares del continente africano".
El portavoz secretario de la Conferencia Episcopal, Juan José Asenjo, declaró a su vez que los obispos españoles no se sienten "más amenazados por ETA que cualquier otro grupo humano o social de este país", y dijo que desconocía el caso de un párroco de la localidad de Llodio, en el norte, que según reportes de prensa ha sido amenazado por ETA por pertenecer al grupo político Unidad Alavesa.
Sin embargo, Asenjo condenó "todo lo que signifiquen amenazas, coacciones, privación de libertad o intimidación".
El de este lunes fue el segundo pronunciamiento de la Iglesia católica en torno a la situación en el País Vasco, luego que el jueves pasado los tres obispos vascos manifestaron que ante los comicios del próximo 13 de mayo existe un "riesgo de fractura social" y se pronunciaron porque el voto sea empleado "como una herramienta constructiva para lograr la paz".
La Iglesia católica fue instada recientemente a excomulgar a los integrantes de ETA y a su entorno, pero la medida fue descartada por la Conferencia Episcopal.
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