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domingo, 24 de noviembre de 2002

Muere Represaliado Vasco

Dado el clima represivo que se vive en Euskal Herria la noticia de las extrañas circunstancias en las que ha fallecido el represaliado político vasco Félix Gil hacen ver que hay cuestiones de fondo en el asunto.

Esto es lo que nos informa La Jornada directamente desde Gara:


Aparece muerto de un balazo en el pecho presunto militante de ETA

Denuncian que el ex preso político sufrió persecución del Estado y los medios de comunicación

Félix Ramón Gil Ostoaga, presunto militante de la organización separatista vasca ETA, quien recientemente había abandonado la prisión por decisión de la juez de vigilancia penitenciaria en Bilbao, apareció muerto la madrugada de hoy de un balazo en el pecho en un bosque próximo a la localidad de Urtaza, en el municipio guipuzcoano de Legazpia, informó este sábado la Ertzaintza, la policía autónoma vasca.

Una autopsia practicada al cadáver del ex preso político determinó que éste cometió suicidio.

La familia de Gil Ostoaga denunció la tarde de este sábado que el familiar, en los últimos días, había sido presionado constantemente por la presencia de "elementos armados" y de "llamadas amenazantes", y afirmó que fue "la presión del Estado y los medios de comunicación" lo que provocó que se quitara la vida.

La parlamentaria de la formación Sozialista Abertzaleak en la Cámara de Gasteiz, Jone Goirzelaia, destacó "el acoso y la persecución" a que fue sometido Gil Ostoaga a raíz de su excarcelación, y señaló la "auténtica guerra sucia de la que ha sido objeto" una persona que, al cumplir las tres cuartas partes de su condena, y en cumplimiento de la legalidad española, fue puesta en libertad.

Pasadas las 17:30 horas, los familiares y amigos de Gil Ostoaga comparecieron en Legazpi para entrevistarse con periodistas.

En conferencia de prensa, en la que estuvieron apoyados por representantes de la formación política nacionalista vasca Askatasuna, los familiares de Gil Ostoaga subrayaron que "la presión del Estado y los medios de comunicación" provocaron la muerte del ex preso político, cuyo cadáver fue localizado en la madrugada de este sábado con un disparo en el pecho y una escopeta a su lado.

Llamadas amenazadoras

La familia del fallecido indicó que no acepta "las condolencias de última hora" que llegaron desde diferentes ámbitos del País Vasco, porque a su juicio no se ha hecho nada para "aliviar la presión" que sufrió Gil Ostoaga desde que salió de la cárcel en libertad condicional, en octubre pasado, por decisión de la juez Ruth Alonso.

Durante la comparecencia en Legazpia, los familiares de Félix Ramón Gil Ostoaga denunciaron que han continuado recibiendo llamadas amenazantes, y que este sábado el hermano del fallecido recibió en su domicilio otra intimidación telefónica.

Asimismo aseguraron que Gil Ostoaga se topaba constantemente con "gente armada" no identificada que evidentemente tenía la misión de intimidarlo.

Para la familia, "todos estos hechos le causaron la muerte", ya que lo presionaron al extremo.

Por su parte, la autopsia practicada al fallecido preso político concluyó que se suicidó. La representación legal de la familia se mostró conforme con la prueba practicada en Donostia, y en consecuencia no pedirá un nuevo informe toxicológico a Madrid.

La familia espera que el cortejo fúnebre con los restos del legazpiarra salga este domingo a las 11 de la mañana, hora local, del Palacio de Justicia de Donostia, para trasladarlos al Tanatorio de Zumarraga y, desde allí, ya por la tarde, a Legazpia.

Ya por la tarde el cuerpo del ex preso deberá ser trasladado a su localidad natal de Legazpia.

A su vez, Rodolfo Ares, parlamentario del Partido Socialista Español, afirmó que "mientras no se tenga toda la información de lo sucedido, hay que ser prudentes".

Ares indicó que "hay que evitar tanto especular como utilizar políticamente esta muerte". 




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