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lunes, 8 de febrero de 2016

Sancho y el "Gora Gaeta"

Para poner dentro de contexto histórico el asunto de la obsesión represiva del régimen borbónico-franquista con repecto al arte, ante los hechos que se sucitaron en Madrid el viernes pasado en contra de los dos integrantes de la tropa de teatro guiñol "Títeres desde abajo", hacemos un poco de arqueología hemerográfica.

Y es que, tal como es descrito en el texto de Darío Fo antes compartido, el mayor perjuicio que enfrentan los dos artistas, más allá de las decisiones tomadas por el inquisidor en turno, es la crucifixión pública que han estado sufriendo en las páginas de los medios de comunicación afines al régimen.

Viajemos a 1992.

Una periodista del diario “El País” puso el listón en lo más alto. Se representaba en el Teatro Arriaga de Bilbao una obra de Alfonso Sastre, “El viaje infinito de Sancho Panza”. En un momento de la obra, el actor principal declamó: «La trinidad de Gaeta os guíe, mi señor». La redactora escribió que «La trinidad de ETA os guíe, mi señor». Más adelante, en su crónica, continuaba, que las «alusiones a ETA y a sus presos aparecen en varios momentos de la obra». Recordaba el pasado de Sastre y el presente de su compañera, Eva Forest, entonces senadora de Herri Batasuna. Para apuntar el objetivo: la pieza de Alfonso Sastre estaba subvencionada por la Sociedad Estatal Expo 92 y por el Tren de Alta Velocidad. Por lo visto, inversión en etarras.

La verdad era bien otra. Sancho Panza, tal y como aparece en “El Quijote”, narraba la “Trinidad de Gaeta”, un lugar que Cervantes ubicaba al norte de Nápoles (Italia) y era cuna de caballeros andantes. El daño estaba hecho, Gustavo Pérez Puig, el director, tuvo que remover cielo y tierra para desmontar la mentira. Pedro Ruiz, el actor principal y recitador de las frases que supuestamente hacían «apología del terrorismo», tomó el micrófono en una sesión posterior en el mismo Arriaga para dejar clara su filiación, poniendo a caer de un burro a todo lo relacionado con la izquierda abertzale. “El País” tuvo que rectificar.


Sancho Panza habla a favor de ETA en el nuevo estreno de Alfonso Sastre

Aurora Intxausti
Las alusiones a ETA y sus presos aparecen en varios momentos en la obra teatral El viaje infinito de Sancho Panza, de Alfonso Sastre, estrenada el viernes en San Sebastián y que será representada en varias ciudades españolas. El espectáculo está subvencionado con 25 millones de pesetas por la Sociedad Estatal Expo 92 y cuenta con el patrocinio del tren de alta velocidad de la empresa estatal Renfe. En esta pieza, el autor no puede evitar recordar al espectador sus afinidades políticas y su vinculación al Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV). Alfonso Sastre está casado con la senadora de Herri Batasuna Eva Forest.

Reproduciendo la escena del Quijote en la que un grupo de galeotes van presos y son liberados por Alonso Quijano, uno de ellos, que se identifica como vasco, contesta al preguntarle Don Quijote por qué está detenido: "Por gritar en mi país Tresoak kalera' [Presos a la calle], 'Amnistia osoa' [Amnistía para todos]". En otro momento de la obra, cuando Don Quijote ha bajado al centro de la tierra y Sancho Panza le pide que salga, uno de los motivos que le da para que desista de su postura es por "la trinidad de ETA". La explicación a esta frase se encuentra en la detención de los tres jefes de ETA -Francisco Múgica Garmendia, Pakito; José Luis Álvarez Santacristina, Txelis, y José María Arregui Erostarbe, Fitti- el pasado mes de marzo en Bidart (Francia).

La obra está dirigida por Gustavo Pérez Puig -director del teatro Español de Madrid, gestionado por el gobierno municipal del PP- y protagonizada por Pedro Ruiz y por Juan Llaneras, en el papel de Don Quijote.


Aurora Intxausti reconoce su error; tenía la firme convicción, la absoluta certeza de haber escuchado "la trinidad de ETA". Al no tener el menor atisbo de duda, "dadas las prisas a que obliga el oficio en tantas ocasiones", no contrastó la información con el autor o el director de la obra: "Me equivoqué".

Lo demás...
Aquí la rectificación:

Gaeta, no ETA

Jesús de la Serna
Con el título Sancho Panza habla a favor de ETA en el nuevo estreno de Alfonso Sastre EL PAÍS publicó el pasado miércoles 9 una información, remitida desde San Sebastian por Aurora Intxausti, acerca de la obra El viaje infinito de Sancho Panza. Inmediatamente, tanto el autor como el director, Gustavo Pérez Puig, replicaron: Aurora Intxausti faltaba a la verdad.La informadora daba cuenta de que en un momento de la obra, "cuando Don Quijote ha bajado al centro de la Tierra y Sancho Panza le pide que salga, uno de los motivos que le da para que desista de su postura es por 'la trinidad de ETA'. La explicación de esta frase", seguía Intxausti, "se encuentra en la detención de los tres jefes de ETA -Francisco Múgica Garmendia, Pakito; José Luis Álvarez Sancristina, Txelis, y José María Arregui Erostarbe, Fitti- el pasado mes de marzo en Bidart (Francia)".

El Sancho Panza de Sastre no pronuncia esas palabras. El fiel escudero de Don Quijote habla exactamente de "La Trinidad de Gaeta", tal como lo escribió Cervantes en El ingenioso hidalgo Don Qujote de la Mancha (segunda parte, capítulo XXII, donde se da cuenta de la "grande aventura de la cueva de Montesinos"). La Trinidad de Gaeta está en un lugar italiano al norte de Nápoles al que Cervantes califica de "flor, nata y espuma de los caballeros andantes". El error de confundir Gaeta con ETA, y unas expresiones en vasco (presoak kalera, presos a la calle, y amnistia osoa, amnistía para todos), puestas en boca de uno de los galeotes liberados por Don Quijote -identificado como vizcaíno-, conducen a Intxausti a escribir que "las alusiones a ETA y sus presos aparecen en varios momentos" de la obra de Sastre. Y emite un juicio de intenciones: "En esta pieza, el autor no puede evitar recordar al espectador sus afinidades políticas y su vinculación al Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV). Alfonso Sastre está casado con la senadora de Herri Batasuna Eva Forest".

Cuando Gustavo Pérez Puig leyó la noticia se apresuró a advertir a EL PAÍS: estaba sorprendido; las deducciones que sacaba la autora de la información se basaban en un dato falso como era confundir Gaeta con ETA.

Al día siguiente, el periódico publicó un despacho de Intxausti en el que decía que Gustavo Pérez Puig había negado que en la obra de Sastre se aludiera a la organización terrorista y que se sorprendía de la confusión producida entre algunos espectadores que creyeron oír "la trinidad de ETA" en lugar de "la Trinidad de Gaeta". En la noticia se contaba también que las frases en vasco reseñadas habían sido aplaudidas el día del estreno en San Sebastian por "un gran número de espectadores simpatizantes de Herri Batasuna".

Tanto en la primera noticia como en la segunda, Aurora Intxausti daba cuenta de que El viaje infinito de Sancho Panza está suvencionada por la Sociedad Estatal Expo 92 y patrocinada por el tren de alta velocidad. A Pérez Puig le preocupa que las conclusiones sacadas por la cronista puedan afectar a estas relaciones.

La supuesta intencionalidad política de la obra puesta de relieve por Aurora Intxausti ha suscitado importantes comentarios en medios teatrales, periodísticos y políticos. Autor y director se consideran dañados. Gustavo Pérez Puig asegura que nadie aplaudió lo que señala Inxausti, que ningún espectador entendió ETA sino Gaeta. La frase presoak kalera, añade, "está dicha en una escena cómica y es apostillada por Sancho Panza diciendo: 'Debe ser vizcaíno, pero por si acaso eskarrikasco', y no la acoge el público con aplausos sino con risas".

La biografía de Gustavo Pérez Puig y su postura de rechazo frontal al terrorismo es de sobra conocida. "Sólo he pretendido", manifiesta, "hacer un hermoso texto sin ninguna connotación".

Alfonso Sastre, que ha introducido en su obra varias citas textuales del Quijote, considera que lo que ha pasado es inverosímil. "Es un hecho pintoresco pero también grave". "Descontando la mala fe por parte de la periodista", comenta, "me queda una sospecha de ignorancia y responsabilidad por su parte. Pero lo peor es que esa crónica haya desencadenado una tempestad en este pequeño vaso de agua que es nuestra vida cultural. Ello avisa sobre los peligros actuales a que está sometida la libertad de expresión. Todo esto nos ha causado, tanto a Gustavo Pérez Puig y a su empresa como a mí, un grave perjuicio".

Aurora Intxausti reconoce su error; tenía la firme convicción, la absoluta certeza de haber escuchado "la trinidad de ETA". Al no tener el menor atisbo de duda, "dadas las prisas a que obliga el oficio en tantas ocasiones", no contrastó la información con el autor o el director de la obra: "Me equivoqué". Lo demás...

Lo demás pertenece al género interpretativo, según las normas periodísticas. Son deducciones y opiniones que por añadidura parten de un dato erróneo, con lo que se vienen abajo.

El Libro de estilo de EL PAÍS es claro en esto: "El rigor del dato es fundamental en las informaciones". Y tanto.

Parece claro que el oído es traicionero. La importancia de la expresión que ha., desencadenado tantas reacciones recomendaba haberla contrastado: había un autor, había unos intérpretes, había un director, había un texto escrito. El fallo básico -un supuesto falso- pudo evitarse.


Esta rectificación no parece que haya servido para que los periodistas de El País sean mas rigurosos en sus crónicas, ellos son los que mas han linchado a Los Titiriteros, ¿sabrán rectificar ahora?






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